Reportaje | Un pontés cría roedores para alimentar a las serpientes
25 ago 2003 . Actualizado a las 07:00 h.José María Vilaboy Bellas cree haber encontrado un filón en la cría de ratones blancos. Metido como está en el negocio (en el garaje de su casa ya produce al mes cuatrocientas mascotas) se ha dado cuenta de que el mundo es más ancho de lo que creía. Y todo gracias a unos mayoristas madrileños que abastecen de alimento a los dueños de animales exóticos ahora tan de moda. Sus clientes le piden cada vez más ratones. Por eso, hace un año inició las gestiones para construir en la zona de Aparral (As Pontes) una granja para criar roedores, a razón de cinco mil al mes, que servirán de comida a las serpientes convertidas en animales domésticos. José María Vilaboy explica que es un mercado con grandes posibilidades, porque los dueños de esos animales exóticos tienen un problema: que sus adorados bichitos sólo comen roedores que matan ellos mismos. Ahí es donde entran productores como este criador de As Pontes, que vende la unidad a un euro, aunque hace precio si el pedido es abultado. El proyecto de Vilaboy Bellas rondará un presupuesto que oscilará en 60.000 y 72.000 euros. Pero como los dueños de las serpientes, el empresario pontés también tiene sus particulares problemas. En este caso, con la Administración autonómica, que le debe otorgar los permisos necesarios para construir la nave. José María Vilaboy aclara que la Xunta no sabe muy bien en qué apartado clasificar su actividad. Para él es simple y llanamente ganadería. Mientras se fragua esa decisión, el proyecto ya ha sido presentado al programa Leader, que gestiona la asociación Euroeume. La granja también producirá conejillos de indias, aunque en menor cantidad.