¿Estamos enganchados los gallegos a la farmacia? Sin ninguna duda. ¿Somos un país pastillero? Sí. ¿Sabemos realmente para qué se debe usar o cómo se debe tomar cada uno de los fármacos que consumimos? Muchas veces no. El protector gástrico (omeprazol) y los medicamentos para el colesterol son los reyes de los botiquines gallegos.
22 ene 2017 . Actualizado a las 10:20 h.La mayoría de los médicos coinciden en este diagnóstico: los gallegos estamos enganchados al botiquín. Y comprobarlo a pie de calle tampoco es muy difícil, basta con pasar un rato a las puertas de una farmacia interceptando a los clientes para darnos cuenta de la realidad de los botiquines gallegos. «Para la tensión, para la depresión, para la ansiedad, para el colesterol, para el ácido úrico...», dice una señora entre risas. «Yo ahora mismo tomo 12 pastillas al día», cuenta otra. ¿Casos aislados? Para nada.«El problema no es solo de la ciudadanía que demanda medicamentos. Muchas veces no hay rigor a la hora de recetarlos o la presión asistencial obliga a pararse poco con el paciente y no da tiempo a revisar todos sus fármacos con lo que, al final, es una suma. A este le añadimos uno y otro y el resultado ese ese: gente que toma hasta veinte pastillas al día».
Lo dice Manuel Viso, médico del Hospital San Rafael. Lo de los antidepresivos y ansiolíticos se merece un capítulo a parte porque su consumo no para de crecer. Dos de cada tres gallegos toman psicofármacos hoy en día. «Somos una sociedad que no quiere sufrir, queremos arreglar las cosas inmediatamente. Acaba de salir de mi consulta un paciente que me contaba que se ponía fatal cuando iba al cine así que antes de entrar en la sala se toma dos pastillas de ansiolíticos. Está claro que buscamos siempre las soluciones más rápidas, también para los problemas emocionales. La sociedad de hoy está enganchada a la píldora». Son palabras que salen de la boca del Jefe de Psquiatría del Chuac, Manuel Serrano Vázquez, que no se cansa de repetir este consejo: nunca os automediquéis.
Tomamos nota aunque, tengo que confesar, que no tardé ni tres días en abrir el bolso y rebuscar esperando que no se hubieran acabado los ibuprofenos que siempre llevo para una emergencia, que no es más que una tapadera para un «me está empezando a doler la cabeza». Con este ritmo es normal que España sea el segundo país del mundo en consumo de medicamentos. Aquí se prescriben alrededor de veinte recetas por habitante y, como un dato lleva a otro, sepan también que más de 250,000 personas ingresan en los hospitales españoles cada año por efectos adversos de medicamentos. «Todos los fármacos tienen efectos secundarios y cuanto más los prolonguemos en el tiempo más fácil será que tengamos esos efectos secundarios», nos recuerda el doctor Manuel Viso.
Hay muchas cosas en el mundo de los medicamentos que desconocemos y algunas muy curiosas. ¿Sabían que la Coca-cola servía para curar el dolor de cabeza y la impotencia o que el Ketchup se vendía en pastillas para dolores de estómago? Anoten este también: colocando en fila las aspirinas que se toman al año en España se cubriría la distancia que separa Galicia de Nueva York.
En Galicia el medicamento más recetado es el protector gástrico, seguido de la atorvastatina, para controlar el colesterol, algo comprensible si tenemos en cuenta que estamos a la cabeza de España en los niveles altos de esta sustancia. Y podría ser más, ya que muchos pacientes ni siquiera lo saben.
LOS MEDICAMENTOS MÁS CONSUMIDOS
1. Omeprazol
2. Atorvastatina
3. Aspirina
4. Paracetamol
5. Simvastatina
6. Alprazolam
7. Tramadol
8. Lorazepam
9. Metformina
10. Pantoprazol