Columnas de voluntarios marchan con ayuda hacia la zona cero de la dana cuando los muertos ya superan los 200
ESPAÑA
Más de 13.000 ciudadanos se organizan en redes para llevar suministros a los damnificados. Mazón restringe la movilidad 48 horas
02 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Frente al caos, al abandono y a la incompetencia que mantienen con sed y hambre a cientos de damnificados tres días después de la dana, el pueblo se puso en pie. Columnas de civiles voluntarios —unos 13.000— marcharon ayer caminando hacia la zona cero de las inundaciones en Valencia armados con palas, escobas, garrafas y carros de la compra llenos de alimentos y productos de primera necesidad. Una riada imparable de solidaridad, organizada a través de redes sociales, partió hacia una veintena de pueblos arrasados por el agua a los que todavía no había llegado ayuda o no la suficiente. El puente peatonal que une la ciudad del Turia con el barrio de La Torre, el más afectado de la urbe, era un incesante discurrir de jóvenes preparados para caminar kilómetros y trabajar quitando barro. La magnitud de esta marea humana fue tal que la Generalitat les pidió primero que volvieran a sus casas para no colapsar las vías, y luego los convocó en la Ciudad de las Artes, hoy a las siete de la mañana, para organizarlos en grupos.
El día de todos los santos, el balance de víctimas mortales ascendió a 207 y el de desaparecidos seguía siendo una incógnita porque todavía «hay muchas zonas a las que no se ha accedido», reconocieron los servicios de emergencias. Una cifra que podría ser insoportable si, como refleja el acta de la reunión de este viernes del Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi), publicada por El Diario, se acerca a 2.500, que son las personas denunciadas como desaparecidas en el 112, que maneja la Generalitat Valenciana. Su presidente, Carlos Mazón, admitió que hay una lista oficial, pero no quiso concretar el número.
Tras el encuentro del Cecopi, el mandatario autonómico explicó que está activando puntos de reparto de agua, alimentos y productos de primera necesidad en Catarroja, Picaña, Paiporta, Sedaví, Torrent, Utiel, Chiva, Alfafar y Masanasa. Sus dos prioridades, dijo, son apoyar el abastecimiento a los centros comerciales y a los supermercados para que hoy estén surtidos y abiertos; y coordinar, a través de la Consejería de Innovación, Industria y Turismo, los realojos temporales de afectados en hoteles, pisos y apartamentos turísticos.
El Ejecutivo regional informó que restringirá la movilidad 48 horas, hasta la medianoche del domingo, en las vías de acceso a los pueblos más perjudicados para facilitar los servicios esenciales y el trabajo de los voluntarios.
2.500 militares y 4.500 agentes
También asistió a la reunión el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien anunció que este sábado 500 militares se sumarán a las «tareas de desescombro, rescate y reparto de provisiones», y ya serán 2.500 los miembros del Ejército sobre el terreno. Además, a última hora del día, su departamento comunicó que el despliegue de guardias civiles y policías nacionales suma casi 4.500 agentes.
Pese al aumento de los equipos de rescate y de forenses —que son un centenar—, la situación seguía siendo muy complicada. Más de 15.000 viviendas continuaban sin electricidad; 252.000 personas, sin teléfono; y 39 carreteras, cortadas. Hoy vuelven a funcionar el Euromed Valencia-Barcelona y las líneas C5 y C6 de cercanías para viajes imprescindibles.
Una veintena de camiones cisterna se desplazaron a los pueblos sin suministro de agua potable, como Chiva, donde pequeños y mayores formaron largas colas para llenar garrafas, botellas y cubos. Su alcaldesa, Amparo Fort, reclamó «urgentemente» agua, comida no perecedera, pan de molde, fiambre, alimentación infantil, leche de fórmula, combustible y más servicios médicos, incluido algún psicólogo. En Algemesí, el regidor pidió que los ancianos, enfermos y dependientes colgasen una sábana en su balcón para indicar que necesitan ayuda. En localidades como Benetússer, Sedaví y Alfafar, los vecinos agradecieron la llegada de voluntarios. «Aunque viniese toda Valencia no sería suficiente. Con todo lo que hay, aquí no sobra nadie», lamentaron en declaraciones a la agencia Efe.
Despacho del rey con Sánchez
Felipe VI mantuvo un despacho extraordinario con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para analizar la última hora de las zonas afectadas. La casa real informó que, a los cien miembros de la Guardia Real que colaboran en Valencia, se sumarán 42 agentes de su Servicio de Seguridad. Los monarcas, que este fin de semana viajan a la zona cero, se pusieron ayer en contacto con los regidores de Chiva, Catarroja, Torrent y Algamesí. Ya el miércoles pasado habían hablado con los de Utiel, Paiporta, Sedaví y Letur para trasladarles su sentimiento de pesar por las pérdidas humanas en sus municipios.
Sánchez, que presidió el comité de crisis en la Moncloa, visitó la sede de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), donde ensalzó su labor de «observación y predicción», y la calificó de «fundamental», después de que el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijoo, responsabilizara el jueves a este organismo y a las confederaciones hidrográficas de la actuación ante la catástrofe. El popular insistió en que España está ante una «emergencia nacional» y que son «necesarios todos los recursos del Estado».
«Lo pida o no Mazón»
También la portavoz de Compromís en el Congreso, Àgueda Micó, pidió a Sánchez que envíe a Valencia «todos los recursos del Estado» que se precisen para auxiliar a los damnificados con independencia de que «lo pida o no» Mazón, a quien acusó de «negligencia» y de «abandonar» a los pueblos devastados por la dana.