Los populares llevarán a la Comisión Europea los ataques a los jueces
21 ene 2024 . Actualizado a las 11:59 h.El PP está dispuesto a mantener la batalla política contra la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, por sus ataques al juez Manuel García-Castellón, que instruye el sumario sobre Tsunami Democràtic en el que imputa un delito de terrorismo al expresidente catalán, Carles Puigdemont y a la secretaria general de ERC, Marta Rovira. Este sábado, la vicesecretaria de organización del PP, Carmen Fúnez, exigió el cese de Ribera por «hostigar» y «dividir» a los jueces al acusar de «prevaricación» a García-Castellón.
Los populares están dispuestos a llevar este caso ante la Unión Europea. Fúnez aseguró que España no se merece tener un Gobierno que «ataca a los jueces» y que los «divide», siempre que estos no se ponen al servicio de sus propios «intereses». La vicesecretaria del PP cargó con dureza contra las palabras de Ribera, por «haber asumido el discurso más radical de los independentistas».
«Fachas con toga»
«El Gobierno de Sánchez quiere a jueces que respondan a los intereses de Sánchez para mantenerse en el poder dividiendo a los jueces dependiendo de su ideología», afirmó Fúnez, que acusó a los socialistas de situar a los jueces «como fachas con toga». Por este motivo, avanzó que el PP llevará este «hostigamiento» a los jueces ante la Unión Europea y la propia Comisión para que «sepan que tenemos un Ejecutivo que no respeta a la justicia española, a la independencia de la justicia y que tiene consecuencias nefastas para todos los españoles».
Preguntada en concreto por la situación del juez García-Castellón, consideró «lamentable» que el PSOE no haya cesado a Ribera 24 horas después de las acusaciones de prevaricación y avisó de que el PP seguirá trabajando desde todas las instituciones y también en la calle «para que este tipo de ataques terminen cuanto antes». «Vamos a pelear hasta el último minuto para paralizar la amnistía, hay un compromiso de Feijoo y de todo el PP», remarcó Fúnez.
El PSOE trató de rebajar la tensión creada por las palabras de Ribera. La ministra portavoz, Pilar Alegría, subrayó que, con independencia de que sus decisiones le puedan gustar «más o menos», el Ejecutivo «siempre es respetuoso» con el Poder Judicial. Al ser preguntada sobre si Ribera se equivocó con esas polémicas palabras o lo que pasó fue que se le entendió mal, Alegría afirmó que la vicepresidenta tercera del Gobierno «intentó trasladar» la posición que el Gobierno de coalición ha mantenido «desde el primer día». «A veces, ciertamente, nos pueden gustar más o nos pueden gustar menos, como a cualquier ciudadano, algún tipo de resolución judicial, pero el respeto prevalece por encima de todo», aseguró.
«Hay establecida una separación de poderes y lo que hacemos es respetarnos unos a otros. Desde luego, desde el PSOE y desde el Gobierno de España lo tenemos muy claro», dijo, antes de contraatacar al PP en esta materia.
«Más o menos acertadas»
Recordó los «famosos mensajes» del que fuera portavoz del PP en el Senado Ignacio Cosidó jactándose de que el partido podría «controlar la Sala Segunda del Supremo por detrás» y las palabras de presidente el partido, Alberto Núñez Feijoo, cuestionando la legitimidad del Gobierno o del Tribunal Constitucional.
Los socialistas tratan de rebajar el alcance de las acusaciones de Ribera, asegurando que no ponen en cuestión la actuación del juez. La ex vicepresidenta del Gobierno y diputada socialista Carmen Calvo dijo que si bien «en algún momento se pueden hacer unas declaraciones más o menos acertadas», el PSOE «no tiene ninguna mácula de saber cuál es su lugar cuando ocupa las instituciones y cuál es el respeto que tiene también por las competencias de todas las demás».