El presidente del Gobierno conocía de antemano lo que iban a plantearle las personas que intervinieron en la apertura del curso político
05 sep 2022 . Actualizado a las 19:20 h.Cinco de los cincuenta ciudadanos que asistieron al acto celebrado en la Moncloa por Pedro Sánchez para abrir el curso político tomaron muy brevemente la palabra para exponer sus inquietudes. Todos ellos fueron preseleccionados de entre las 250.000 personas que escribieron cartas al presidente o participaron en alguna de las visitas dentro del programa Moncloa Abierta. Sánchez conocía por tanto de antemano cuáles eran sus preocupaciones y tenía preparadas las respuestas.
Almudena, de Tomelloso, empleada de hogar, fue la primera en hablar. Explicó que las mujeres de su sector demandan mayor seguridad en el trabajo e igualdad en el derecho al paro. Algo que Sánchez aprovechó luego para anunciarle que este martes el Consejo de Ministros aprobará el subsidio al desempleo para las empleadas del hogar.
Naiara, de 18 años, estudiante de segundo de bachillerato en Rivas Vaciamadrid, expresó su preocupación por el cambio climático e instó a hacer una apuesta segura por la ecología y las energías renovables.
Inés Ruiz, maestra de escuela jubilada de Córdoba, exigió seguridad sobre las pensiones. Los jubilados, dijo, «tienen mucho que aportar a la sociedad contribuyendo con su sabiduría y su experiencia». Pidió por ello que se cuente con ellos, que representan el 21 % de la población. «Somos los naniabuelos, porque cuidamos a los nietos sin recibir salario, pero sí cariño», sostuvo.
Rafael, profesor de Educación Física en Cullera (Valencia), alertó sobre el problema de la obesidad infantil. Él escribió una carta al presidente ofreciendo su instituto como centro piloto para implantar acciones sobre hábitos saludables. Según indicó, hay un alto porcentaje de población escolar con sobrepeso que pasa muchas horas delante de pantallas y duerme de manera deficiente. Pidió responsabilidad al Gobierno, al profesorado y a las familias para darles instrumentos que les proporcionen una vida saludable. «Yo puedo ayudar a muy poca gente, pero usted tiene el privilegio y la herramienta para hacer que la gente viva mejor», le dijo a Sánchez.
Finalmente, Mireia, de Barcelona, de 20 años y estudiante de Derecho, se refirió al cambio climático y pidió medidas para frenarlo. Demandó además a Sánchez que se siga luchando para conseguir la igualdad entre hombres y mujeres y para que España sea «un país justo y feminista».
En su alocución posterior, Sánchez se dirigió personalmente a los cinco intervinientes, ninguno de los cuales hizo mención a la gestión del Gobierno, a cuestiones como la situación económica creada por la guerra de Ucrania o el incremento desbocado de los precios. El acto fue conducido por la periodista Carme Chaparro, encargada de dar paso a cada participante.