El independentismo exige que Robles dimita como jefa del espionaje para sofocar la crisis

M. Lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

La ministra de Defensa, Margarita Robles, este miércoles en el Congreso de los Diputados
La ministra de Defensa, Margarita Robles, este miércoles en el Congreso de los Diputados J.J.Guillén | EFE

«¿Qué tiene que hacer un Estado cuando alguien declara la independencia», cuestionó la ministra justificando al CNI

28 abr 2022 . Actualizado a las 08:40 h.

Los socios externos del Gobierno ERC, Junts, CUP, EH Bildu y BNG exigieron ayer que rueden cabezas en el Ejecutivo por el presunto espionaje a políticos independentistas catalanes y vascos, y verbalizaron que quien debe asumir esa responsabilidad y dejar el ministerio es la titular de Defensa, Margarita Robles, ya que de ese departamento depende el CNI, al que acusan de practicar las escuchas. Al acoso a la jefa de la inteligencia se sumaron PNV y Unidas Podemos. La crisis del espionaje conlleva otra interna en el sector minoritario del Gobierno. Mientras Yolanda Díaz defendió que antes de pedir la dimisión de Robles «hay que investigar», Pablo Echenique reclamó que «rueden cabezas» porque sería «inconcebible», dijo, que este escándalo se zanjase sin que nadie asumiera responsabilidades políticas.

El primero en poner en la diana a Robles, —ministra desde el 2018 cuando el espionaje habría comenzado en el 2017—, fue el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, quien la acusó de ser la responsable, por acción u omisión, del espionaje masivo a una sesentena de dirigentes nacionalistas. Ayer calificó de «insuficientes» e incluso «insultantes» las explicaciones dadas por el Gobierno y acusó a la ministra de estar «incapacitada para seguir en el cargo». «Debería dimitir», tanto si no sabía que el CNI había espiado a los nacionalistas, en este caso por «incompetente», como si lo sabía. Y si no asume responsabilidades, quien la ha nombrado ministra la ha de «hacer dimitir», exigió Aragonès.

Fueron las declaraciones de Robles en el Congreso las que acabaron de encender al dirigente de ERC. La ministra preguntó a los nacionalistas: «¿Qué tiene que hacer un Estado, un Gobierno, cuando alguien vulnera la Constitución, declara la independencia, corta las vías públicas, realiza desórdenes públicos, tiene relaciones con dirigentes políticos de un país que está invadiendo Ucrania?». Fue su manera de justificar la labor del CNI. Son palabras «extremadamente graves», valoró el jefe del Ejecutivo catalán. A su juicio, «bombardean» la posibilidad de que haya un mínimo entendimiento con el Gobierno. 

«La jueza progresista»

Además de al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, quien calificó de «burradas» las explicaciones de Robles y le sugirió que «pida la entrada en el PP», ella no se amilanó y espetó a Mireia Vehí (CUP): «Les viene bien aparecer como víctimas, pero no les he oído nunca defender los principios básicos del Estado de derecho y los derechos y libertades de todos los ciudadanos».

Tanto la portavoz de Junts, Miriam Nogueras, como el del PNV, Aitor Esteban, que ayer se sumó al acoso a Robles, exigieron una comisión de investigación. La primera, en cualquier caso, ya sentenció que «por acción u omisión, el presidente del Gobierno es el máximo responsable del espionaje. Robles respondió que la Ley 11/2002 que regula la actividad del CNI le impide dar información sobre los servicios secretos. Y remitió a las explicaciones que la directora del CNI, Paz Esteban López, ofrecerá en la comisión de gastos reservados, una vez se constituya. Duro con Robles también fue Esteban. La llamó «mera aplaudidora de las fuerzas de seguridad» y la inquirió: «¿Qué ha sido de aquella jueza progresista que era usted? 

«Muchos tendrán que callarse»

«Espero que en esa comisión salga todo, puedan ver la documentación, y a lo mejor muchos que ahora dan lecciones tendrán que callarse», añadió ella. Fuentes de Defensa aclararon que el CNI no es el único que puede trabajar con el sistema Pegasus, y que pueden tenerlo otros cuerpos policiales.

Néstor Rego (BNG) subrayó que Robles «no puede continuar en el cargo ni un minuto más» porque el Gobierno «actúa de forma ilegal» y espía a la fuerzas que «no coinciden con los postulados de los partidos del régimen».

El pleno del Congreso sirvió también para que Sánchez hablase del espionaje por primera vez. Se mostró convencido de que «todo lo que se ha hecho por parte del CNI ha sido ateniéndose escrupulosamente a la ley». Y respondió a Rufián enumerando las medidas del Ejecutivo para esclarecer el escándalo como abrir un control interno en el CNI, la investigación del Defensor del Pueblo y el desbloqueo de la comisión de gastos secretos [o de secretos oficiales] para compartir la información.

El Congreso elige a los diputados con acceso a secretos oficiales, 4 de ellos secesionistas 

El Pleno de Congreso votará hoy a los diez diputados, uno por grupo parlamentario, que estarán autorizados a acceder a materias clasificadas como secretas, que recibirán información sobre los fondos reservados y que podrán controlar las actividades del CNI. Tras la resolución de Meritxell Batet que rebaja de tres quintos a mayoría absoluta los requisitos para ser elegidos, cuatro de los miembros serán de partidos independentistas.

El PSC vota con ERC, JxCat, CUP y En Comú que la Cámara presente una denuncia 

c. reino

El Pleno del Parlamento catalán aprobó ayer presentar una denuncia judicial «en nombre» de la Cámara por el presunto espionaje. La iniciativa salió adelante con los votos de ERC, Junts, PSC, En Comú Podem y la CUP. Vox, Ciudadanos y el PP votaron en contra.

La presidenta de la Cámara catalana, Laura Borràs, leyó la declaración, que, entre otras cuestiones, remarca que «este caso de espionaje político supone una flagrante vulneración de los derechos fundamentales, tanto individuales como colectivos». Asimismo, el Parlamento manifiesta «el apoyo y toda la solidaridad con las al menos sesenta y cinco personas que hasta el día de hoy se sabe que han sufrido este espionaje político en el marco del Catalangate», y «exige al Gobierno del Estado que investigue con la máxima celeridad y transparencia a los órganos implicados».