ERC cede y acepta a una secesionista radical de Junts en la Mesa del Parlamento

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Aurora Madaula, diputada de Junts
Aurora Madaula, diputada de Junts

Transige para poder desbloquear la investidura de Aragonès

09 abr 2021 . Actualizado a las 20:28 h.

Esquerra tuvo ayer un nuevo gesto amistoso con Junts para desbloquear la investidura de Pere Aragonès. Los republicanos aceptaron a una independentista radical en la Mesa del Parlamento autonómico a pesar de las dudas que suscita su presencia.

Casi dos meses después de las elecciones, el independentismo sigue sin encontrar una fórmula para formar Gobierno y traducir en un acuerdo de legislatura el que fue su mejor resultado electoral. Para engrasar las negociaciones, Esquerra dejó resuelta una de las carpetas que se había abierto, la sustitución de Jaume Alonso-Cuevillas como miembro de la Mesa de la Cámara. Junts propuso a Aurora Madaula y ERC no acogió con entusiasmo el anuncio en un primer momento y hasta trató de vincular su elección a la investidura de Aragonès. Los republicanos, sin embargo, confirmaron ayer que votarán a favor de Madaula, dirigente del ala más radical de JxCat y que ni siquiera tiene formación jurídica para sentarse en la Mesa del Parlamento. 

El sectarismo de Madaula

Madaula pidió en una ocasión a sus compañeros de bancada que negaran el saludo a los diputados no soberanistas cuando se cruzaran en los pasillos de la Cámara. Pero Esquerra cede por segunda vez para tratar de allanar la investidura de Aragonès. La primera fue para la elección de Laura Borràs como presidenta del Parlamento, una dirigente sobre la que Oriol Junqueras había dicho que si fuera de Esquerra no sería candidata al estar imputada por corrupción. ERC defendía que el voto a favor de Borràs debía implicar el apoyo de los junteros a la investidura de Aragonès. Pero no fue así. En las dos votaciones celebradas en marzo, los de Puigdemont se abstuvieron y el dirigente de ERC no alcanzó la presidencia de la Generalitat.

Resuelto el escollo de Madaula, Esquerra y Junts tienen hasta el 26 de mayo para cerrar un acuerdo. La presión aumenta, pero los avances no aparecen. La ANC apretó ayer poniendo en circulación un autobús que recorrerá Cataluña reivindicando la mayoría independentista y urgiendo a formar un Gobierno.

Los posconvergentes insisten en que el punto central de las conversaciones es la hoja de ruta soberanista. «Estamos para ejecutar el mandato del 52 % que ha votado independencia», afirmó la diputada en el Congreso Míriam Nogueras. Toni Comín, de Junts, fue más explícito: «La negociación está encallada porque ERC no dice qué hará si fracasa la mesa de diálogo» con el Gobierno. Es lo que impide a día de hoy sellar una alianza, además del reparto de poder, la estrategia en Madrid y el papel del Consejo para la República.