Sánchez tiene todo atado para salir investido presidente del Gobierno

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Pedro Sánchez, al finalizar la segunda sesion del pleno de investidura el pasado día 5
Pedro Sánchez, al finalizar la segunda sesion del pleno de investidura el pasado día 5 Jesús Hellín | Europa Press

ERC y Bildu blindarían la investidura con síes en caso de transfuguismo en la votación

07 ene 2020 . Actualizado a las 08:37 h.

Llegó la hora de la verdad. Pedro Sánchez quiere hacer bueno el dicho de que a la tercera va la vencida, y tras sus dos fracasadas intentonas para recabar la confianza de la Cámara, el candidato socialista confía en salir investido y poder liderar el primer Gobierno de coalición desde la restauración de la democracia.

Las cuentas están muy ajustadas, pero si nada se tuerce a última hora, Sánchez logrará dos votos más a favor que en contra, una mayoría simple que le concederá automáticamente la presidencia. Apoyarán el proyecto socialista los 120 diputados del PSOE, los 35 de Unidas Podemos, los seis del PNV, los dos de Más País, el de Compromís, el de Nueva Canarias, el del BNG y el de Teruel Existe, un total de 167 apoyos que el pasado domingo se quedaron en 166 por la ausencia de Aina Vidal, de En Comú Podem. «El 7 no fallaré. Por nada del mundo me perdería una investidura que será mucho más que una votación», ha indicado tras desvelar que padece cáncer.

Al otro lado habrá 165 gracias a los votos del PP, Vox, Cs, JxCat, la CUP, Navarra Suma, PRC, Foro y Coalición Canaria, cuya diputada decidió a última hora desmarcarse de la abstención que había determinado su ejecutiva.

Lo ajustado de la votación y la imposibilidad de solicitar el voto telemático han motivado que la dirección del Grupo Socialista, pero también la de Podemos y la de ERC, recomendase a sus diputados que pasasen la noche en Madrid y evitar así imprevistos o sustos de última hora relacionados con el transporte, al coincidir la jornada decisiva del debate de investidura en plena operación retorno tras las vacaciones de Navidad.

Sánchez espantó el pasado domingo cualquier posibilidad de un episodio de transfuguismo dentro de sus filas. Pero las presiones hacia varios de los diputados socialistas para que se replanteen el sentido del voto no cesan. José Luis Aceves, representante por Segovia, anunció una denuncia ante la policía por las «amenazas» telefónicas que está sufriendo un compañero en esa provincia. Según avanzó a Efe, «alguien debió de pasar ese teléfono en un foro creyendo que era el mío y ahora lo están friendo a amenazas e insultos, con decenas de llamadas con números ocultos», comentó. Además de Aceves, otros diputados socialistas y regionalistas no paran de denunciar presiones para que descarrile la investidura. Y es que si uno de los 167 diputados cambia el voto habría empate a 166 y, según el reglamento, tras tres votaciones sin cambios en el resultado, la investidura decae.

 Presiones a Teruel Existe

También el representante de Teruel Existe, Tomás Guitarte, denunció pintadas en su pueblo para que no allanase la investidura y el pasado domingo le recomendaron abandonar el Congreso por otra puerta distinta a la de la Carrera de San Jerónimo para evitar a la multitud. El líder de Vox convocó a acampar a las puertas del ayuntamiento para incrementar la presión para obtener un empate a 166. Sin embargo, fuentes de ERC aseguran que en ese caso un diputado de ERC (13) o incluso de Bildu (5) podría pasar de la abstención al sí, ya que todas las estrategias que la derecha ha empleado para diluir al bloque que investirá a Sánchez no han hecho más que cohesionarlo.

Se saldrá de dudas a partir de las 12.45 de hoy. El pleno se reanuda a las 12.00 con un debate exprés en el que Sánchez intervendrá cinco minutos, al igual que los grupos. Después se votará en voz alta. De ahí que ERC y Bildu, que ya han estudiado el orden alfabético de sus diputados, puedan reaccionar de haber algún tránsfuga.