El Ejecutivo de Pedro Sánchez lamenta la utilización que hacen los populares del Senado
06 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El pasado lunes Pablo Casado denunció en público no haber recibido una invitación de Moncloa para participar en un acto conjunto con el Gobierno francés para celebrar la derrota de ETA. La ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, reconoció «desconocer la logística de las invitaciones», aunque apuntó que «el aforo era reducido y que se invitaron a todos los expresidentes», lamentando las ausencias de Rajoy y de Aznar, los dos del PP. Posteriormente, fuentes de Moncloa apuntaron a La Voz de Galicia que quizá habría que preguntarse si existió alguna directriz desde Génova para que no asistiese ningún miembro del partido, ya que además de Rajoy, desaparecido de la vida política, y de Aznar, que presentaba un libro esa misma tarde, también fallaron a la cita la presidenta del Congreso, Ana Pastor, y el presidente del Senado, Pío García-Escudero. Estos dos últimos se decantaron por asistir a una comida organizada por el Foro Abc Deloitte en la que Pablo Casado era el gran protagonista de la jornada.
La feroz oposición en el Senado
Por otra parte, Celaá admitió en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de ayer que desde el Gobierno consideran que el PP está empleando de forma inadecuada su mayoría en el Senado, tratando de convertir la Cámara Alta en una herramienta para ejercer la oposición. «Lamentablemente, sí hemos observado algunas conductas de abucheo, de tratar de no dejar hablar al orador...», respondió ante una pregunta formulada por este periódico. Después hizo una llamada a la reflexión relacionada con un popular juego de naipes. «Nos parece una lástima que se esté jugando a la pequeña, porque en los tiempos en los que nos movemos, con grandes expectativas y grandes desafíos, nos gustaría muchísimo que en vez de jugar a la pequeña, jugáramos todos a la grande. Porque el interés de todos los españoles debiera ser sacar el país adelante. Y los echamos de menos», concluyó.