Duran acusa a Mas de buscar solo adhesiones y le advierte que CiU es cosa de dos

La Voz BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Rosa Jiménez | EFE

El presidente de la Generalitat aprovechó el tradicional discurso del día del patrón de Cataluña, para añadirle una pizca de épica al alicaído proceso soberanista y pedir «coraje», «decisión» y «heroicidad»

24 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Un día después de disparar todas las alarmas en el independentismo, al poner por primera vez en cuestión la fecha del 27-S, Artur Mas llamó a la unidad del soberanismo para «luchar» y «vencer» a un Estado español, simbolizado en el dragón de Sant Jordi, que a su juicio «falta al respeto» a la «dignidad» del pueblo catalán y a su voluntad de autogobernarse.

El presidente de la Generalitat aprovechó el tradicional discurso del día del patrón de Cataluña, para añadirle una pizca de épica al alicaído proceso soberanista y pedir «coraje», «decisión» y «heroicidad». «La magnitud de los retos provoca que solo podamos salir adelante si vamos todos a una», proclamó.

Sus palabras tenían dos destinatarios, Esquerra y Unió, que no tardaron en replicarle. El líder de ERC, Oriol Junqueras, subrayó que su formación ya «ayuda» a Mas a conseguir un Estado catalán justo y limpio. E insistió en que no será ningún obstáculo para las plebiscitarias y se mostró convencido de que el 27-S habrá elecciones. Josep Antoni Duran Lleida, desde Bruselas, recordó a Artur Mas que el hecho de que Unió y Convergència vayan juntos, no depende solo de la formación democristiana. Y que Unió apuesta por agotar el mandato y no celebrar las elecciones catalanas hasta el 2016.

La lealtad de ERC

Tras las municipales, se verá en qué medida ERC es leal al Gobierno catalán, apuntó Duran. Está por ver si después de los comicios locales, Mas recupera la idea de una lista única del soberanismo para el 27-S, como era su intención inicial, y si la llamada a la unidad va en esa línea.

Pero la novedad del discurso fue la vuelta a la reivindicación del derecho a decidir, cuando una parte del soberanismo ya daba por superada esa fase y se situaba en la de la proclamación de la independencia. «Somos un pueblo que quiere decidir colectivamente su futuro», dijo. Mas trata de reincorporar al proceso a quienes están a favor de la consulta, pero que se habían desmarcado a raíz del pacto independentista entre CDC y ERC. Que los catalanes puedan votar en un referéndum sigue siendo su objetivo.