El fuerte impulso de Podemos abre un escenario inédito de tripartidismo

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Es la primera fuerza en voto directo, aunque el PP ganaría las elecciones, según el CIS

06 nov 2014 . Actualizado a las 13:33 h.

Adiós al bipartidismo y hola al tripartidismo. El esperado sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) confirmó ayer el espectacular ascenso de Podemos, la formación liderada por Pablo Iglesias, que no solo se consolida como tercera fuerza política en España en la estimación de voto (22,5 %), sino que es ya el primer partido político en voto directo (17,6 %), baremo que recoge la opción expresada de manera espontánea por los ciudadanos, sin tener en cuenta otras variables. El PSOE es la segunda fuerza en voto directo (14,3 %) y el PP pasa a ser la tercera (11,75 %). En el pasado mes de julio, Podemos era la segunda en intención directa, superando al PSOE y quedándose a solo un punto del PP.

Casi el 74 % entre los tres

Los datos ya elaborados indican sin embargo que los populares ganarían de nuevo en este momento las elecciones generales con un 27,5 % de los sufragios, seguidos por los socialistas, con un 23,9 %, y de Podemos, con un 22,5 %. El cuarto partido, IU, se situaría ya a gran distancia de estos tres, con un 4,8 %. Se trata de un escenario político inédito desde la transición, en el que por primera vez hay tres grandes fuerzas con porcentajes similares de voto, que se mueven en una franja de solo cinco puntos (22,5-27,5), y que acaba de hecho con el modelo bipartidista que ha imperado hasta ahora. Entre PP, PSOE y Podemos acaparan el 73,9 % de los sufragios.

El PSOE acorta distancias

De los tres, el PP es el único que pierde estimación de voto respecto al pasado barómetro, correspondiente al mes de julio. Los populares pasan del 30 % que el CIS les adjudicaba entonces a un 27,5 %. El PSOE crece sin embargo desde el 21,2 % que obtenía hace cuatro meses al 23,9 % que consigue en octubre, aupado por el nuevo liderazgo de Pedro Sánchez, que logra frenar la sangría de votos socialista. La diferencia entre el PP y el PSOE se sitúa ahora por tanto en 3,6 puntos, la menor desde la celebración de las pasadas elecciones generales, en las que los populares superaron a los socialistas en 15,89 puntos. Respecto a aquellos comicios, el PP se ha dejado ya 17,12 puntos del 44,62 % con el que ganó Rajoy. El PSOE ha perdido también 4,83 puntos del 28,73 % que cosechó Rubalcaba.

Fuerte castigo a UPyD e IU

Pero el gran ascenso es el que experimenta Podemos, que pasa del 15,3 % que le otorgaba el CIS en julio, al 22,5 %. Los datos confirman que el partido de Pablo Iglesias, que en las elecciones europeas obtuvo un 7,93 % ha llegado para quedarse y que su techo electoral no se conoce todavía. El fuerte impulso de Podemos se produce a costa del hundimiento de las fuerzas minoritarias. Los más perjudicados son IU, que se deja casi la mitad de sus votos respecto al mes de julio, pasando de un 8,2 % a un 4,8 %, y UPyD, el partido de Rosa Díez, que se deja una tercera parte de su apoyos, descendiendo del 5,9 % al 4,1 % en estimación de voto.

En pleno debate soberanista en Cataluña, CiU y Ciutadans son las únicas fuerzas minoritarias que mejoran. El partido de Artur Mas sube del 2,9 % de julio al 3,8 %, y el de Albert Rivera duplica holgadamente sus apoyos, pasando el 0,9 % al 2,1 %. ERC pasa del 3,3 % al 2,3 % y PNV y Coalición Canaria se mantienen en 0,1 % y 0,3 %, respectivamente.

La irrupción de Podemos como una fuerza mayoritaria capaz de disputarle el triunfo en las elecciones generales al PP o el PSOE, únicos partidos que han gobernado en España desde 1982, es más espectacular si se tiene en cuenta que se trata de un partido de nueva creación, que no existía hace solo diez meses, que ni siquiera tiene todavía un secretario general y que está aún en pleno proceso de elaboración de sus bases programáticas.

La verdadera potencia de fuego de Podemos en unos comicios a nivel nacional, y no en sondeos, no se podrá medir sin embargo hasta que se celebren las elecciones generales, dado que la formación ha decidido no concurrir con su marca a las municipales de mayo. La extrapolación de los resultados del sondeo a unas elecciones es muy difícil, dado que un 21,9 % de los encuestados no sabe o no contesta a quién votaría. A ello se suma otro 15,7 % que se decanta por la abstención y un 4,2 % que votaría en blanco. El sondeo se realizó del 1 al 13 de octubre, en pleno escándalo por la utilización de tarjetas opacas para Hacienda de consejeros y directivos de Caja Madrid y Bankia y también en plena crisis del ébola.

Un 86,6 % desconfía de Rajoy

En lo que afecta a los líderes, el sondeo no incluye a Pablo Iglesias, dado que Podemos no cuenta con representación en el Congreso. La principal novedad es que Pedro Sánchez, el nuevo secretario general del PSOE, se sitúa como segundo más valorado con una nota de 3,85 sobre 10, solo por detrás de la navarra Uxue Barkos, de Geroa Bai, que tiene una calificación de 4,12. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, es uno de los peor valorados, con un 2,31. Pero peor aún para el jefe del Ejecutivo es el dato de que inspira «poca» o «ninguna» confianza a un 86,6 % de los españoles y solo un 11,7 % se fía de el. En el caso del líder del PSOE, son un 67,8 % de los encuestados los que desconfían y un 15,5 % los que le dan crédito.