El PSOE acelera la publicación de la actividad privada de los diputados

ESPAÑA

Quiere aprobar antes de un mes la reforma que acabará con el secreto sobre los ingresos extra de los parlamentarios

25 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El Grupo Parlamentario Socialista pretende impulsar una rápida y profunda reforma del régimen de actividades extraparlamentarias de los diputados que aporte una mayor transparencia no solo sobre los trabajos que desempeñan, sino también sobre las votaciones en las que se les autoriza a compatibilizarlas con el escaño. El portavoz socialista, José Antonio Alonso, anunció ayer su intención de dar la mayor celeridad a esta reforma, de manera que pueda ser aprobada en menos de un mes. Todos los grupos llegaron el pasado mes de abril al acuerdo de establecer una normativa que hiciera públicos los dictámenes sobre las incompatibilidades de los diputados, pero no todos están de acuerdo en un trámite tan acelerado sobre la reforma de un reglamento vigente desde el inicio de la democracia.

«Salto cualitativo»

Hasta ahora, tanto los debates en la Comisión del Estatuto del Diputado, en donde se analizan las actividades extraparlamentarias y las incompatibilidades, como la votación misma sobre esos dictámenes, son una de las pocas cuestiones declaradas secretas. Según el portavoz socialista, el dar publicidad a los debates y la votación supondrá un «salto cualitativo desde el punto de vista de la transparencia», al tiempo que facilitará a los ciudadanos la tarea de controlar las actividades de los diputados.

Alonso se mostró convencido de que no habrá problemas para una rápida reforma del reglamento y de que podrá aprobarse por unanimidad. El pasado mes de abril, la Comisión del Estatuto del Diputado se mostró a favor de que la votación en el pleno sobre las incompatibilidades de los diputados se hiciera pública.

Sin embargo, el presidente de la comisión, el socialista Frances Vallés, se opuso entonces a que se hicieran públicos los debates en el seno de la comisión ya que afectaban a actividades privadas que en el momento de debatirse no están todavía avaladas por el Congreso.

En lo que sí parece haber acuerdo en en que una vez que se haya aprobado el dictamen de la Comisión del Estatuto del Diputado este se haga público para todos los diputados para que sepan así qué es lo que están votando en el pleno.

El objetivo que persigue ahora el PSOE es mucho más ambicioso y pretende que no solo los diputados, sino todos los ciudadanos, tengan un conocimiento total de las actividades que desarrollan al margen de su escaño.

Las restricciones al acceso a la lista de actividades de los diputados son en este momento tan amplias que ni siquiera ellos mismos pueden consultar libremente las de los otros parlamentarios. Para ello deben pedir autorización a la Mesa del Congreso. Si se les concede, deben examinarla en presencia de un funcionario de la cámara y no pueden hacer fotocopias. La propuesta que impulsa ahora el PSOE es que todos esos datos estén en la web del Congreso a disposición de quien quiera consultarlos.

Acebes y Michavila

Aunque la norma lleva inalterada desde el inicio de la democracia, el debate en torno a esta cuestión cobró fuerza recientemente a raíz de varios casos que afectaban fundamentalmente a miembros del PP. Entre ellos se encontraba el ex ministro de Interior, Ángel Acebes, que compatibiliza con el escaño su cargo de consejero de Caja Madrid, o el diputado José María Michavila, que representa a varios artistas y es socio de una empresa que gestionaba patrimonios. Michavila ya ha abandonado el escaño.

Lo cierto es que son muy pocos los diputados que no declaran ninguna actividad parlamentaria al margen de su trabajo en el Congreso. En la última lista conocida, solo 33 de los 350 diputados no hacían constar ninguna actividad. En la mayoría de los casos declaran ser conferenciantes o tertulianos, seguidos de los concejales y de las actividades altamente remuneradas, entre ellos un farmacéutico y un cirujano.