La presidenta de la Cámara ordenó cerrar las puertas ante la duda de que había más sufragios emitidos que diputados presentes El PP obligó ayer a paralizar un pleno del Congreso de los Diputados para verificar si, como denunció su portavoz, Luis de Grandes, se habían registrado en una votación más sufragios que diputados presentes en los escaños socialistas. El incidente provocó una considerable trifulca, ante la cual la presidenta de la Cámara, Luisa Fernanda Rudi, ordenó cerrar las puertas para realizar un recuento de los parlamentarios que se encontraban en el hemiciclo. Pero, tras una reunión improvisada de los portavoces con la presidenta, el PP retiró su acusación y pidió «más cuidado» en próximas ocasiones. El PSOE dice que la acusación es falsa.
18 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.El incidente, que mantuvo interrumpida la sesión durante casi quince minutos, se produjo a primera hora de la mañana, tras la votación de un convenio internacional relativo a la fase de producción de los lanzadores Ariane, que se saldó con 303 votos a favor y una abstención. El portavoz del grupo popular tomó la palabra para solicitar que los servicios de la Cámara verificasen que «lo que apreciamos a simple vista, que están rellenos todos los votos en el cuadro ¿de votación electrónica¿ se corresponde con los vacíos que vemos al final de la Cámara», en referencia a algunos escaños socialistas. De Grandes aseguró que el hecho de que se registrasen en las votaciones más votos que diputados presentes viene apreciándose «con reiteración» y pidió «por el prestigio de la Cámara» que no fuera así. La presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, ordenó entonces a los servicios de la Cámara el cierre de las puertas del hemiciclo y la confección del listado de la votación para comprobar si éste se correspondía con los diputados presentes. Los portavoces de los distintos grupos conversaron durante esta interrupción con la presidenta y el resto de los miembros de la Mesa, mientras se sucedían los comentarios entre los diputados y las acusaciones entre los escaños de PP y PSOE. Votación Finalmente, el PP renunció a que se realizase la comprobación, dada la unanimidad de los portavoces en que el incidente «no debe llegar a más» y el hecho de que no había sido afectado el sentido de la votación. «Que sirva para que en el futuro todo el mundo tenga más rigor en estas cosas», dijo el portavoz del PP, mientras algunos de los diputados de su grupo insistían en pedir el recuento y eran increpados desde los escaños del grupo socialista.