La militancia de Anova deserta, crítica con la deriva política de la dirección

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña SANTIAGO / LA VOZ

ELECCIONES 2020

PACO RODRÍGUEZ

«Nós si nos presentamos ás eleccións», advierte la agrupación de Ourense

18 mar 2019 . Actualizado a las 10:03 h.

Algunos abandonos vienen de lejos, de los tiempos del dedazo de Pablo Iglesias que obligó a compartir candidatura para las autonómicas con Podemos; otros se produjeron tras la asamblea de Pontevedra que, en marzo del 2017, acabó en gresca; hubo militantes que lo dejaron cuando la dirección desafió a Villares, y unos cuantos más se están yendo ahora, a raíz de la decisión de Anova de separarse definitivamente de En Marea y tratar de llegar a un acuerdo con Podemos que, al fracasar, obligó al partido fundado por Beiras a renunciar a presentarse a las generales del 28A.

Fueron bajas incesantes de la militancia de un partido que dejó el Bloque para darle un aire fresco al nacionalismo y que ahora se queda en poco más que un grupo de amigos aferrados a la figura de Beiras. De 1.200 militantes a unos 250 antes de la ruptura con Podemos. En las últimas semanas se fueron algunos más, como la concejala viguesa Marga López, y otros dicen que se lo piensan, como la diputada Alexandra Fernández. Todavía puede producirse una deserción en bloque si finalmente deciden marcharse todos los de Ourense. Y son un centenar, lo que dejaría a Anova al borde de la desaparición.

Lo que pasa es que los de Ourense no van a dejar que los echen: «Se marchamos, xa decidiremos nós cando, non vai botarnos ninguén», advierte Lito Prado, portavoz del partido en la comarca de la capital ourensana y protagonista del pulso con la cúpula que se mantiene desde que, en una asamblea que la dirección de Antón Sánchez quiso invalidar, los de Ourense decidieron ir a las elecciones con En Marea. El enfrentamiento es tal, que Prado quiso dejarlo bien claro: «Nós si nos presentamos ás eleccións, os nosos candidatos son Iván Olmos e Millán Brea, os candidatos de En Marea pola provincia de Ourense».

A su entender, la crisis de Anova se produce por haber deturpado la dirección actual los principios fundacionales del partido creado por Beiras tras su marcha del BNG: «Anova fundouse para servir á sociedade galega». Asegura que es lo que siguen haciendo sus militantes en Ourense, donde «somos a cadea de transmisión da sociedade». Pero no la cúpula, a la que acusan de preocuparse solo de colocar a los suyos: «A dirección dixo que non ía ás eleccións porque no se daban as condicións necesarias; traducido, iso quere dicir: ‘Porque non nos deron os postos que queríamos’», asegura Prado. «Pero iso é a cúpula, non son as bases».

Con similar dureza se pronuncia Xurxo Triñanes, de Boiro Novo, que ya quiso dejar Anova cuando se pactó con Podemos una lista unitaria para las autonómicas, pero lo convencieron y se quedó. Cuando en las primarias de En Marea la dirección de su partido se enfrentó a Villares, él se sumó a la candidatura Somos Quen, encabezada por el diputado Davide Rodríguez, otro destacado miembro de Anova que se desmarca de la línea política de Sánchez y apoya a Villares. Entonces sí se dio de baja, y ahora, ya desde fuera, Triñanes asegura que la ruptura de Anova, primero con En Marea y ahora con Podemos, es «un ridículo absoluto. Se fora un partido con estrutura, terían dimitido todos, pero como aquí os dirixentes e as bases son todos os mesmos...». A su entender, Anova cavó su propia fosa cuando llegó a un acuerdo con Podemos que Pablo Iglesias mantuvo mientras le interesó, «e que rompeu cando deixou de serlle útil».

En una entrevista en la Radio Galega, el portavoz nacional de Anova, Antón Sánchez, reconoció que se cometieron errores «no percorrido destes sete anos», en referencia a la trayectoria seguida desde el nacimiento de AGE, y en el entorno de Anova se admite también que sentó muy mal que Podemos lanzase la propuesta de mandar a Beiras al Senado sin consultarlo ni con el veterano nacionalista ni con su partido, con el que se estaba gestando la reedición de la coalición del 2015 y 2016.

Ourense en Común rompe

La tormenta salpicó a Ourense en Común. En la ciudad -a diferencia del resto de la provincia- la marea local contaba con el apoyo de la dirección de Anova. Ahora, Podemos y EU sondean la posibilidad de presentarse por su cuenta tras fracasar las negociaciones para reeditar el acuerdo del 2015, en consonancia con la ruptura de las cúpulas de sus partidos con fuerzas nacionalistas. Como informa Miguel Ascón, el candidato, Martiño Xosé Vázquez, presentó una propuesta de candidatura que excluye a esas formaciones. «A emerxencia do adianto electoral non axudou a que foramos quen de pechar un acordo», dijo.