«¡Traballar para o coche!...»

María Conde PONTEVEDRA / LA VOZ

EDUCACIÓN

RAMON LEIRO

Alumnos de cuarto de la ESO del IES de Poio aprenden a elaborar presupuestos en una clase de manejo de dinero

29 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tienen entre quince y dieciséis años. Y por tanto, el gasto futuro que tienen más próximo en la mente es el de su primer coche. Aunque más de uno quedó sorprendido de lo que le puede costar mantenerlo. Una media de 9.000 euros al año (letras incluidas), para un rodaje de 25.000 kilómetros anuales. La misma cuantía en que hoy se sitúa el salario mínimo interprofesional anual. «¡Traballar para o coche!», espetó uno de los alumnos del IES de Poio que ayer participaron en una animada charla en la que dos expertos les introdujeron en el siempre complicado mundo financiero.

Este curso, organizado por la Concellería de Xuventude de Poio, que dirige Gregorio Agís, trató de hacerles ver a los chavales, de dos grupos de 4º de la ESO, que «aprender a manexar ben os cartos se pode aprender na escola». Así, otra de las cuestiones que les mostraron los dos expertos de Ventos-Estudos Ambientais que impartieron la actividad, María Cancela y Manuel Domínguez, fue a preparar un presupuesto semanal.

Partieron de una supuesta paga de sus padres de 15 euros y, aunque a sus monitores les confesaron que no son muy ahorradores, lo cierto es que cumplieron el objetivo marcado de conseguir un mínimo ahorro -así como 3 euros- después de descontar las consumiciones en el instituto, la salida al cine o la recarga del móvil. Fueron varios los que como ingreso extra sugirieron «ayudar en las tareas del campo» a sus familiares.

Saber equilibrar ingresos y gastos y conocer los distintos medios de pago eran dos objetivos clave en esta actividad. «Estiveron moi participativos», señaló María Cancela. Otras de las cuestiones abordadas fueron las tarjetas de crédito y débito -ningún alumno reconoció tenerlas de momento- y los tipos de interés, de los que ya tenían nociones. Los monitores les pusieron como ejemplo el tipo de interés de demora a efectos tributarios del 5 %, el del 2 % para un depósito bancario y el de un 7 % para un préstamo. Y si bien al principio no les pareció muy costoso el primero, después de hacer los cálculos llegaron a la conclusión de que «no está tan mal...».