Medio millón de gallegos pagarán el precio real de mercado desde octubre
05 jun 2015 . Actualizado a las 10:34 h.Si usted es uno del medio millón de gallegos que disponen en sus casas de un contador digital, con una precisión tal que es capaz de registrar su consumo hora a hora, está de enhorabuena, pues a partir de octubre pagará de verdad el precio de mercado de cada kilovatio hora que gaste. El Gobierno publicó ayer al fin en el Boletín Oficial del Estado la resolución que ampara legalmente la facturación eléctrica por horas para los consumidores acogidos a la tarifa regulada (13,5 millones frente a 12 millones del mercado libre). Formalmente habrá de entrar en vigor en julio, pero, como es habitual, el Ministerio de Industria concede un período de gracia de tres meses a las comercializadoras de electricidad para facturar de ese modo más detallado y real.
La aplicación de verdad de este sistema se producirá quince meses después de su entrada en vigor. Desde julio del 2014, la referencia de precios es ya el mercado mayorista de electricidad. Sus cotizaciones son distintas de una hora para otra, pero todavía no están repercutiendo en el recibo. Lo que se hace es facturar a partir de un precio medio mensual que fija el operador del sistema: Red Eléctrica. ¿Por qué una media y no el precio real? Porque no todo el mundo dispone de contadores digitales y aunque los tenga era precisa, de todos modos, una normativa que homologase los sistemas de telegestión de datos de los contadores digitales. Esa normativa ha tardado tanto por las complicaciones técnicas que representa procesar lo que registra un solo medidor inteligente las 24 horas del día y las 720 del mes. Esto multiplicado por los millones de clientes con contadores digitales.
En toda España hay unos once millones de consumidores con esos aparatos nuevos, pero no todos están en tarifa regulada. Este dato no está desglosado. En Galicia había hace unos meses algo más de medio millón de usuarios, pero a finales de año está previsto que Gas Natural Fenosa (principal distribuidora y comercializadora) haya colocado 780.000. Esa compañía tiene un millón y medio de clientes gallegos. Hay otros 300.000 de otras empresas.
Las eléctricas están obligadas a renovar todo el parque de contadores sin coste de instalación alguno para el cliente. En diciembre del 2018, todos los aparatos tendrán que ser ya nuevos.
Pero la pregunta del millón que se harán es si a partir de octubre pagarán más o menos por la luz. Pues ya dependerá más de sus hábitos de consumo. Por regla general, el mercado de electricidad arroja precios más bajos en horas de menor demanda. La diferencia es especialmente significativa en la tarifa con discriminación horaria (como se puede apreciar en el gráfico superior). Por la noche es hasta un 50 % más barata que la general. Pero para sacar provecho de esto es preciso adaptar los hábitos y programar, por ejemplo, la lavadora o la secadora para que funcionen de madrugada.
Porque, eso sí, pasado el mediodía el precio se dispara hasta casi la medianoche.
En la dirección web www.esios.ree.es/web-publica/pvpc/ pueden seguir las cotizaciones hora a hora del día. Pasadas las ocho de la tarde se cuelgan las previstas para la jornada siguiente. El precio de la energía también se mueve por otro factor: si ese mes hay mucha producción renovable el coste se abarata. Esto suele ocurrir en la primera mitad del año. En la segunda, al revés.
El consumo de electricidad representa un tercio de la factura. La otra parte, impuestos y costes fijos para financiar el sistema eléctrico, no varía.
En el 2009, el Ministerio de Industria decidió que cada tres meses se celebrase una subasta de energía para fijar el precio de la electricidad para los consumidores de tarifa regulada. La puja determinaba un tercio del total de la factura de la luz. La última se celebró el 19 de diciembre del 2013. El resultado fue anulado por lo escandaloso de la subida que implicaba: un 11 %. El Gobierno aprobó por decreto un precio provisional que se aplicó de enero a marzo del 2014.
Casi 143.000 gallegos cambiaron de compañía el año pasado
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia publicó ayer el informe anual de supervisión de los cambios de comercializador en el 2014. Y, por primera vez, da datos por comunidades autónomas. De ellos se extrae que 142.500 gallegos se cambiaron de compañía comercializadora de electricidad el año pasado. En toda España fueron 3,5 millones de consumidores. En el caso de Galicia esos representan el 7,8 % del total de clientes, mientras que la media nacional fue del 12,2 %.
Estas cifras, aclara Competencia, se mantienen constantes desde el 2012.
De los 3,5 millones de clientes que se cambiaron de eléctrica, algo más de la mitad (1,8 millones) dejaron la tarifa regulada para pasarse al mercado libre. Otro millón y medio de usuarios se movieron dentro de ese último segmento. Y solo 200.000 decidieron pasarse a una comercializadora de referencia, las autorizadas por el Gobierno para operar con la tarifa regulada, rebautizada desde el año pasado con el pomposo nombre de precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC).
Dentro de esos 3,5 millones de cambios no están las 230.000 solicitudes (casi el 6 %) que fueron rechazadas por las empresas. Según Competencia, el principal motivo para decir no fue que el número de identificación del solicitante no coincidía con el del titular del punto de suministro.
El regulador del mercado eléctrico precisa que el 98 % de los cambios se realizaron en plazo. El 2 % se realizaron con retraso. De estos últimos, el 66 % eran de Unión Fenosa Distribución.
En el caso del gas natural, las peticiones de cambio en Galicia sumaron el año pasado 16.253, un 6,6 % de los 246.759 puntos de suministro. Se trata de la tasa más baja de toda España, donde la media fue del 10 %.