La presencia de furtivos capturando erizos ha hecho saltar todas las alarmas en la Cofradía de A Coruña, un pósito que tiene un plan racional, en colaboración con Barallobre, para extraer la especie, del que se benefician 6 embarcaciones y 14 tripulantes. Son conscientes de que los equinodermos recogidos por los furtivos son puestos en los mercados.
Por ello, desde la cofradía coruñesa ya se han puesto en contacto con los responsables de lonja de A Coruña «para que extremen os controles e as inspeccións sobre o ourizo que chega a O Muro», señalaron desde el pósito. «Aseguráronnos que o ourizo que collen os furtivos está sendo vendido en esa lonxa sen guía de transporte e sen documentación de procedencia, e iso non se debe permitir». Y lo mismo le piden al servicio de Guardacostas de Galicia.