El Santander absorbe Banesto y se reorganiza para abordar compras

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Botín cierra la adquisición total de Banesto, tras adquirirlo en 1994 tras su intervención.
Botín cierra la adquisición total de Banesto, tras adquirirlo en 1994 tras su intervención. benito ordóñez< / span>

La operación supondrá cerrar 700 oficinas, una drástica reducción de plantilla y el fin de una marca con más de 100 años de historia

18 dic 2012 . Actualizado a las 14:51 h.

Adiós a Banesto y a sus 110 años de historia. El Banco Santander decidió ayer mover ficha en su negocio doméstico con una operación previsible, pero siempre negada por su dirección. Su consejo de administración decidió ayer lanzar una opa por el 100 % de Banesto (ya controlaba casi el 90 % del capital). De forma casi inminente, el negocio (créditos, depósitos, clientela en general...) y plantilla pasarán a integrarse totalmente en el Santander, y la marca, obviamente, desaparecerá. También lo hará Banif, la elitista división de banca privada del gigante que preside Emilio Botín.

La plantilla hace tiempo que esperaba esta salida para la filial, sobre todo después de que en las últimas semanas se produjeran hechos como el volcado de todos los correos electrónicos de empleados de Banesto en la red del Santander. Las dos entidades ya comparten plataformas tecnológicas y una operativa idéntica. «Solo nos faltaba compartir clientela y política comercial», expresaban ayer dentro de Banesto. Estas son algunas claves del proceso:

El impacto laboral

Necesidad de un ajuste. Santander y Banesto necesitaban ajustar su plantilla para mejorar sus márgenes. De hecho, el primero ya lo está haciendo en Brasil, uno de sus operación supondrá el cierre de unas 700 oficinas (el grupo no quiere tener más de 4.000 a corto plazo) y la salida de miles de empleados que la entidad no cuantifica, pero que en ambientes sindicales aseguran que no bajarán de 2.000. Los representantes de los trabajadores instaron ayer a la dirección a abrir una mesa laboral para que todas las salidas sean pactadas. En un primer avance, la cúpula del Santander les explicó que la marcha de empleados será «no traumática, por rotación natural o bajas incentivadas».La salida de trabajadores se irá escalonando hasta el 2014, aunque la fusión estará lista en el primer trimestre del 2013, bajo la batuta de Alfredo Sáenz, el consejero delegado que ya pilotó la compra de Banesto por el Santander hace 15 años.

La opa

Acciones con prima. Para abordar la compra del 10 % que le falta, el Santander tirará de su autocartera de bolsa. Ofrece a esos inversores una prima del 25 % sobre el precio de la acción del pasado viernes, lo que supondrá unos 260 millones de euros en títulos. Se espera que este canje, y toda la fusión, esté listo en la primavera del 2013. El coste total de la reestructuración, según el banco, rondará los 400 millones.

El contexto

Necesidad de cubrir provisiones de Banesto. Banesto tenía que cerrar el año con unas provisiones de 1.200 millones de euros para cubrir con las normas dictadas por Madrid. Esa cobertura se la podrá dar ahora el Santander, evitando así a su filial pasar por ese trago. A la matriz, además, le permite reasentarse en España (su prioridad parecía hasta ahora el mercado exterior), sumando cuota de mercado.