Frigodeza ve en la tragedia mortal «un cúmulo de circunstancias imprevisibles»

Rocío García Martínez
ROCÍO GARCÍA LALÍN / LA VOZ

LALÍN

Miguel Souto

El funeral por el lalinense fallecido en el matadero será hoy en Soutolongo

07 ago 2020 . Actualizado a las 10:30 h.

El equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Lalín investiga los detalles del accidente que este miércoles causó la muerte del lalinense Adrián Ferreiroa Gutiérrez, de 30 años de edad, en las instalaciones de la empresa Frigodeza. El joven, empleado de la firma Metalbo, se encontraba en las instalaciones del matadero del polígono industrial de Botos reparando un ascensor que se utiliza para el transporte de cerdos.

El ascensor tenía una plancha defectuosa y el operario se encontraba realizando tareas de soldadura para poner a punto el dispositivo. Por causas que se desconocen, el ascensor se puso en marcha y descendió desde la planta superior en la que se encontraba a una situada tres metros más abajo, donde se encuentra la sala en la que los animales son aturdidos con un gas específico antes de la matanza. En la labor cotidiana del matadero, los animales salen de las cuadras inferiores y son anestesiados con gas y subidos en el elevador hasta la zona de matanza superior.

La empresa responsable del matadero, Frigodeza, colabora con la Guardia Civil en sus pesquisas. Ha iniciado además una investigación interna para tratar de esclarecer todos los detalles del accidente. Según explican desde la firma, todo apunta a que la tragedia fue debida a «un cúmulo de circunstancias absolutamente imprevisibles». El ascensor nunca debería haber bajado a la zona inferior ni, como se presume, quedarse trabado abajo, provocando presuntamente la muerte del joven al inhalar los gases para el aturdimiento de los animales.

Desde Frigodeza pondrán todo su empeño en intentar averiguar cómo pudo producirse el fatal accidente. «Estamos consternados e tristes. Pola familia, polos compañeiros... Case era de aquí. Facía labores de mantemento continuadas e era ben coñecido por todos. Coñecía ben o matadoiro e o seu funcionamento. Aínda non nos explicamos ben que puido pasar. Isto non tiña que ter sucedido de ningunha maneira. O único que queremos é aclarar todo», indican con pesar.

Autopsia y velatorio

El cuerpo del joven fallecido fue trasladado a Santiago para la realización de la autopsia y posteriormente devuelto a Lalín para la celebración del velatorio. El velatorio se celebra desde la tarde de ayer en el tanatorio O Deza, en la Avenida da Romea de la capital dezana. El funeral está previsto para hoy, viernes, a las 19.45 horas, en la iglesia parroquial de Santa María de Soutolongo. La inhumación tendrá lugar acto seguido en el cementerio de la parroquia.

El polígono de Botos fue escenario este jueves de otro suceso de entidad menor. A las 7.20 horas se dio aviso de un becerro suelto campando a sus anchas por el parque empresarial. Fue apresado y retenido y se informó a sus propietarios. El animal se había escapado de Frigodeza.