La década en la que las comarcas pasaron de emigrar a recibir población

d. c. LALÍN / LA VOZ

DEZA

Miguel souto

El cambio de tendencia está ayudando a frenar el declive demográfico

25 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes se han caracterizado históricamente por ser centros emisores de población. La emigración fue un fenómeno demográfico determinante en la configuración de la población de la zona a lo largo del siglo XX y también a finales del XIX. América, Europa, otros puntos de España e incluso la marcha a las ciudades gallegas fueron los destinos que emprendían muchos habitantes de las comarcas para labrarse un futuro.

Esa situación se ha ido modificando con el transcurrir de las décadas finales del siglo anterior y en el actual. Según los datos actualizados que aporta el Instituto Galego de Estatística (IGE) a través de su informe sobre los indicadores migratorios de la comunidad, se observa un cambio de tendencia en la última década que transformó Deza y Tabeirós-Montes de un centro emisor de población a uno receptor.

El trabajo publicado ayer por el IGE, actualizado hasta el 2022, permite establecer una comparativa de diez años en diferentes indicadores migratorios. El primero es el más básico, el saldo migratorio, que no es más que la diferencia entre la cantidad de personas que llegan a un territorio frente a las que lo abandonan. En el último registro el saldo migratorio total fue positivo en 656 personas, mientras que en el 2012 era de -398. En Deza pasaron de un saldo de -281 a 456, mientras que en Tabeirós-Montes evolucionó de -127 a 200.

A excepción de Rodeiro, todos los municipios experimentaron este cambio. A Estrada cuenta con un saldo migratorio de 134 personas, el mejor de la década, al igual que Forcarei (66), Agolada (43), Dozón (2) y Vila de Cruces (86). También fue positivo en Lalín (207) y Silleda (126), aunque el mejor dato de los últimos diez años lo tuvieron en el 2018 (262) y en el 2019 (171), respectivamente. El único concello que sigue con un saldo migratorio negativo es el de Rodeiro, que firmó un déficit de 8 personas. Eso sí, junto con el del 2017 es el registro más bajo.

Emigración exterior

La mayor parte de la población que reciben las comarcas procede del extranjero. En Deza el saldo migratorio interior es de 16 personas, mientras que el exterior es de 440. En Tabeirós-Montes es similar, de 16 frente a 184. De hecho, por concellos, es el saldo exterior el que permite tener un saldo global positivo. Lalín, Silleda, Vila de Cruces y Forcarei son los municipios en los que también llegaron más personas de otros puntos de Galicia de los que se fueron.

En cuanto al porcentaje de población extranjera, todos los concellos contabilizaron su cifra más alta de los últimos diez años. n Deza se pasó de un 4,43 a un 6,86 y en Tabeirós de un 1,83 a un 2,96. En este sentido, aquí si hay diferencias entre comarcas, ya que la dezana tiene una cantidad mucho mayor que sus vecinos.

Lalín es el concello en el que reside más población extranjera con un 8,66 %. Le sigue Silleda (6,86), Rodeiro (4,7), Vila de Cruces (3,57), Agolada (3,19), A Estrada (3,11), Forcarei (2) y Dozón (1,6). Una década atrás la cifra en Lalín era del 5,19 y en Rodeiro del 1,15, por ejemplo.

La llegada de población foránea supone un respiro demográfico para la zona. Son precisamente los inmigrantes quienes están frenando el declive poblacional y, en lugares como Lalín o Silleda, artífices del aumento de habitantes.