Vecinos y políticos reclaman juntos a la Xunta que mejore la carretera PO-213
DEZA
Los usuarios exigen el ensanche del sinuoso vial y la creación de arcenes
31 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Más de medio centenar de usuarios habituales de la carretera A Estrada-Ponte Ulla (PO-213) se reunieron este viernes por la noche para analizar los problemas que presenta el vial y para tratar de involucrar a los políticos en la búsqueda de una solución definitiva que lleva años reclamándose. A la reunión asistieron el edil de Medio Rural, Gonzalo Louzao, por parte del gobierno local así como los portavoces de todos los grupos políticos de la oposición: Luis López Bueno (PSOE), Xoán Reices (BNG) y Mar Blanco (Móvete). No acudió, en cambio, ningún representante de la administración autonómica, que también fue convocada como parte directamente afectada, ya que la carretera en cuestión es de la Xunta.
La reunión se abrió con una exposición de las reivindicaciones de los usuarios, que piden una mejora del trazado de la PO-213, suprimiendo las curvas más complicadas, dotando de mayor anchura a la vía para facilitar el tránsito de todo tipo de vehículos en ambas direcciones y creando arcenes para el tránsito peatonal.
En la actualidad, la carretera consta de dos carriles de 2,5 metros cada uno y carecen de arcenes de ningún tipo. Los usuarios piden que los carriles se doten del ancho reglamentario para este tipo de vías —que está por encima de los tres metros— y que se construya un arcén para el tránsito de personas, bicicletas o vehículos agrarios. Reclaman además la construcción de aceras en los núcleos de población delimitados en el PXOM.
Los usuarios abogan también por el ensanche de los dos puentes del trazado — el de Ponte Nogueira y el de As Covas— hasta dotarlos de unas dimensiones que permitan el cruce de dos vehículos.
En la reunión, que se desarrolló en tono conciliador, participaron vecinos de todas las parroquias de paso del vial. Residentes en Paradela, Barbude, Ribeira, Aguións, Moreira o Arnois tomaron parte en un encuentro en el que todos los grupos políticos locales apoyaron la iniciativa vecinal y coincidieron en la necesidad de una actuación para mejorar la seguridad en la carretera. Todos los políticos, cada uno en su papel, prometieron implicarse para conseguir la mejora.
El edil responsable de Medio Rural trasladará a la alcaldía las demandas vecinales para que el Concello medie ante la Xunta para lograr el objetivo.
La pelota está ahora en el tejado de la administración autonómica, como titular del vial. Los vecinos esperan que la Xunta convoque ahora una reunión para analizar la situación de la carretera y valorar con los afectados las posibles soluciones.
Los usuarios reunidos este viernes son conscientes de que las afecciones a terrenos y la necesidad de un proyecto requieren unos tiempos de actuación determinados. No obstante, subrayan que el coste de la reforma no sería tan elevado como el de otras infraestructuras y consideran que, si hay voluntad política, el problema se podría resolver en un plazo de tiempo razonable. «Non pedimos urxencia, pero queremos que a reforma emprenda a marcha e non que volva quedar a cousa parada outra vez», dicen. Los usuarios —ahora organizados— estarán atentos a los nuevos pasos que los políticos se han comprometido a dar.