Aquí la Guardia Civil, dígame

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

DEZA

Cedida Guardia Civil

En los cuarteles los agentes atienden a diario decenas de consultas de la ciudadanía sobre el estado de alarma

26 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La situación que estamos viviendo es única y nueva para todos. El estado de alarma preocupa y, sobre todo, genera dudas en la ciudadanía y los cuarteles de la Guardia Civil de la zona se han convertido en verdaderos consultorios que reciben a diario una avalancha de preguntas.

La normativa cambia continuamente y a veces no es fácil para los vecinos estar al día. Los guardias reciben todo tipo de consultas. Una de las que más se repite es saber si pueden ir más de una persona en un coche. La respuesta es no, pero con algunas excepciones como el caso de llevar a un mayor al médico con el que en muchos casos el conductor convive.

Dada la actividad agrícola de la zona, muchas de las llamadas tienen que ver con esto. Los vecinos plantean cuestiones sobre casi todo lo imaginable respecto a esta actividad y que abarca desde si se puede echar el estiércol o poner las patatas hasta saber si se puede uno desplazar a echar purín, aunque en este caso la consulta suponía un viaje de una punta a otra de un mismo municipio. La respuesta fue: «E non o podería botar vostede máis preto da súa casa?».

Que uno puede salir a la huerta, sobre todo si está al lado de casa está claro, pero hasta ahora se exigía que a la plantación se desplazara una persona sola si ir implicaba salir de los límites de la parcela de la propia vivienda. Ahora pueden hacerlo dos en el caso de que vivan juntas, algo que parece mucho más lógico y sobre todo, porque en muchos casos, las tareas se afrontan un poco en equipo y uno solo no siempre basta para algunos trabajos.

Hay dudas también sobre quién puede desplazarse para ir al médico, o si se puede llevar a alguien en el asiento trasero. Ayer, día de cobro, la preocupación de muchos jubilados era saber si podían ir a cobrar al banco y de ahí las llamadas a la Guardia Civil para despejar dudas y por si colaba el permiso.

Estos días las patrullas tanto de seguridad ciudadana como de Tráfico recorren las carreteras, villas y aldeas para informar y también para velar porque se mantenga el estado de alarma y la ciudadanía permanezca confinada. Aunque la mayoría cumple, siempre hay a quien le motiva eso de jugar al gato y al ratón con la autoridad, aunque el perjuicio y el peligro de contagio sea para los que se arriesgan a salir y no solo que los pillen.

Botellones y garbeos

Los agentes continúan cursando alguna denuncia todos los días. Son sobre todo los fines de semana, como el pasado sábado y domingo, los días en los que se observan más infracciones, aunque no sean muchas. En carretera se paran sobre todo a todos los coches en los que viaja más de una persona. En algunos casos, los vecinos intentan buscar excusas y dar alguna explicación que suene convincente.

Hay también quien no tiene reparos en ir con la verdad por delante y manifiesta, por ejemplo, que se desplazaba acompañado a comprar bebidas para realizar un supuesto botellón. Y es que los fines de semana es cuando más pesa la reclusión y hay quien no resiste la tentación de coger el coche y darse un garbeo aunque sea solitario.

A estas patrullas se suman, tanto a pie como en coche, las de los agentes de la Policía Local en los diferentes concellos de la zona. Una vigilancia que incluye tanto los cascos urbanos como el rural. En Lalín, la Policía Local incrementó el control y las advertencias y ayer señalaban que ya vieron más gente en la calle. Entre las llamadas de atención se encuentra la efectuada a algún vecino que iba a comprar un paquete de tabaco y al que se le sugirió la posibilidad de llevarse varios al menos para no tener que bajar todos los días al estanco.

Dado el aumento de casos positivos en Lalín, creen que los cuerpos de seguridad deberían poder saber quién tiene que estar confinado tanto por cuarentena como por positivos y velar que nadie se salta el aislamiento manteniendo, como los médicos, el secreto profesional y garantizar así una mayor seguridad.