El mítico locutor dio voz en el santuario lalinense a poemas místicos de Lope de Vega o Góngora
09 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Una mujer irrumpe como un huracán en la sacristía del santuario de O Corpiño. «Vengo a saludar al ‘protagonista’», declara. El protagonista no es otro que Luis del Olmo, leyenda radiofónica e integrante, junto con el barítono Luis Santana y el pianista Antonio López, del trío que en la tarde de ayer inauguró el cartel cultural del templo lalinense.
«Yo nunca me hago fotos con famosos, pero me pasé mi vida escuchando Protagonistas y quiero una con usted», explica la mujer. Del Olmo no tiene inconveniente en posar bajo la imagen de la Virgen de O Corpiño.
Del Olmo se declara hombre de fe, pero confiesa que «tenía más de la que tengo». «La voy perdiendo por el egoísmo que veo en la sociedad», cuenta minutos antes de iniciar su recital en el santuario. Aunque lo conocía por referencias, es la primera vez que visita el templo de Santa Baia de Losón. Lo hace encantado de regresar al municipio dos décadas después de aquella edición de la Feira do Cocido en la que ejerció de pregonero. «Recuerdo el cariño de la gente y aquel cocido maravilloso», comenta. ¿El mejor del mundo? Para alguien de Ponferrada es complicado responder. «El cocido de Lalín, junto con los que hacemos en el Bierzo, pueden competir en los fogones internacionales», explica diplomáticamente.
Gastronomía aparte, él está en O Corpiño para poner voz al recital de poesía mística que organiza el santuario. La poesía en general está en horas bajas. La afición a la mística es hoy una rareza. Aún así, el tirón de Del Olmo ha llenado la iglesia. «Si de alguna forma podemos acercar la poesía a la juventud, merece la pena. Ojalá podamos convencerles», desea.
Empieza el recital. La inconfundible voz sobrecoge recitando Retrato de María, de Lope de Vega. Del Olmo, que con su programa Protagonistas recorrió España de punta a punta, no puede echar de menos esa época. Su periplo continúa como integrante del trío que ayer emocionó en el concierto dedicado a la Virgen de O Corpiño. «Es algo que ni pensaba ni soñaba», confiesa.
La actuación es el pistoletazo de salida de un menú cultural con el que el párroco de o Corpiño, José Criado, trata de arrastrar a la fe a creyentes y no creyentes. El primero fue plato fuerte, pero aún se cuecen sorpresas de peso.