La comarca apuesta por una Cámara de Comercio única para toda Galicia

Susana Luaña Louzao
susana luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

DEZA

Miguel Falcón y los demás consejeros llevan desde abril prorrogando sus cargos en la Cámara.
Miguel Falcón y los demás consejeros llevan desde abril prorrogando sus cargos en la Cámara. m. miser< / span>

Vilagarcía rechaza la fusión provincial a favor de un organismo autonómico

23 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras cuatro años esperando por una solución viable desde que el Gobierno central levantó a los empresarios la obligatoriedad de cotizar en las Cámaras de Comercio, estas entidades están, al menos en Galicia, al borde de la ruina, sin alternativas de financiación para sus actividades. La de Vilagarcía es una excepción. No es la única, pero sí una de las pocas que han logrado reducir gastos y administrar los fondos que tenían para subsistir en estos años de incertidumbre en los que nada se decidió sobre el futuro de estos organismos creados al servicio de los empresarios pero que muchas veces se utilizaron en beneficio de otros intereses espurios, como ocurrió en Vilagarcía en la época de Vioque.

Por fin, parece que el Gobierno gallego está dispuesto a poner en marcha un decreto para adaptar las Cámaras gallegas a la ley estatal, y una de las medidas que se proponen es la de fusionar dichas entidades para optimizarlas y hacerlas solventes, basándose en lo que la propia normativa estatal dice sobre entidades provinciales, en lugar de las demarcaciones camerales que operan en la actualidad.

La Cámara de Comercio de Vilagarcía todavía podría reflotar un tiempo más en solitario. Como indica su presidente, Miguel Falcón, «los presupuestos del 2015 los tenemos cubiertos». Pero él mismo es consciente de que «no podemos seguir así mucho tiempo».

Sin embargo, el consejo de administración de Vilagarcía no apuesta por la fusión provincial. Está claro que Vigo queda demasiado lejos y que la unión con la de Pontevedra no resolvería nada porque está en un situación peor que la de Vilagarcía. Por eso, en la demarcación arousana son mucho más ambiciosos y apuestan por una sola Cámara gallega; «sería la manera de dar un buen servicio, el servicio que hoy en día necesita la empresa gallega». Eso sí, sin prescindir de las sedes actuales, que quedarían como delegaciones de la central, ni pasar por alto los territorios históricos. «Por supuesto, en el consejo de administración tendrá que estar representado el empresariado de la de Vilagarcía».

Menos personal

A lo largo de estos cuatro años sin ley, la Cámara de Comercio de Vilagarcía se financió con el dinero que tenía de atrás, con las subvenciones para la puesta en marcha de programas de interés para las empresas que trabajan en el extranjero -bodegas sobre todo, en la comarca-, y con las aportaciones de 250 firmas que voluntariamente se han asociado porque forman parte de ese perfil al que los servicio de la Cámara les interesa, y que pagan, como mucho, 300 euros al año. «También hay programas de interés para la pequeña empresa, pero se han acostumbrado a no pagar y es muy difícil que se asocien», admite Miguel Falcón, presidente de un consejo de administración cuyos cargos expiraron en el mes de abril pero que se mantienen a la espera de que la Xunta tome una decisión.

A mayores, siguiendo también las directrices que llegaban de Madrid, se ha reducido personal. La Cámara de Comercio de Vilagarcía tenía antes ocho trabajadores y ahora tiene seis, una cifra que pasa casi desapercibida si se tiene en cuenta que en toda España, las entidades camerales han perdido dos mil empleos.

Demarcación

Galicia tiene 9 Cámaras de Comercio, a saber: Ferrol, A Coruña, Santiago, Vilagarcía, Pontevedra, Vigo, Tui, Lugo y Ourense. La trayectoria de todas ellas desde que la adscripción y el pago no es obligatorio es muy distinta. Unas, como la de Ferrol, están al borde de la bancarrota; y otras, como A Coruña o Vilagarcía, se mantienen a flote. Esta última cuenta con 21 concellos en su demarcación: Barro, Caldas, Cambados, Campo Lameiro, Catoira, Cerdedo, Cuntis, A Estrada, Forcarei, O Grove, A Illa, Meaño, Meis, Moraña, Pontecesures, Portas, Ribadumia, Sanxenxo, Valga, Vilagarcía y Vilanova.

250

Socios en Vilagarcía

La entidad vilagarciana llegó a tener 10.000 cuando la adscripción era obligatoria.