La próxima semana anunciarán la fecha de un paro indefinido que suscriben las granjas de Deza y Tabeirós Hace tiempo que el sector avícola no tiene mejor coyuntura en producción y consumo y los precios al consumidor son altos. El sector padece por el lado del productor que no se explica como en tales circunstancias sus contratos descienden. Están cansados de vivir incrementando costos y reduciendo beneficios. «E mellor pechar», llegan a asegurar. La asociación de criadores gallega, Acriaga, sectorial de Unións Agrarias, junto con toda la Plataforma Avícola Nacional se pone en pie de guerra.
07 nov 2000 . Actualizado a las 06:00 h.Los productores agotaron las posibilidades de negociar con Administración y empresas. Éstas deciden sobre los medios de producción y el precio del producto. No existe interprofesión donde se armonicen las posiciones de integradores y productores. El gobierno ignora una petición del Congreso para que regule el sector y los integradores rechazan negociar con la producción. Además cotizan como autónomos y no como agricultores. Ante esta situación, según dijo ayer el presidente de Acriaga, Javier iglesias, sólo queda dejar de producir, promover un paro indefinido que fuerce a las empresas al diálogo y provocar desabasteciemiento para que intervenga la Administración. «Obligannos as integradoras por non querer negociar e o goberno por non regular», dice Iglesias quien resalta la unión en la comarca, en Galicia y en España, con los productores preparados para el pulso con la industria. Falta la fecha, están en pie de guerra y hay muchos millones en juego.