Pinchazo del líder en Son Moix (2-2)

DANIEL PANERO COLPÌSA

DEPORTES

MIQUEL A. BORRÀS | EFE

El Barcelona paga sus errores con un empate ante un aguerrido y combativo Mallorca

26 sep 2023 . Actualizado a las 23:55 h.

El Barcelona puso fin este martes a la buena racha que llevaba en Liga. El conjunto de Xavi no pudo pasar del empate a dos en Mallorca en un partido en el que se puso por detrás en el marcador hasta en dos ocasiones pero en el que consiguió arañar un punto en los instantes finales gracias a un gol de Fermín López. Con este empate, los culés son líderes, pero abren la puerta a que Girona o Real Madrid les puedan arrebatar la primera plaza esta misma jornada.

El partido comenzó con la exigencia del calendario presente. El Barcelona había jugado hace tres días y volvía a hacerlo dentro de otros tres, así que Xavi probó un once repleto de novedades respecto al equipo que se impuso al Celta. Araújo, Íñigo Martínez y Balde ingresaron en la zaga, Gavi se hizo con el puesto del lesionado Frenkie de Jong y Ferran Torres fue la gran sorpresa en el lugar casi inamovible de Lewandowski en la punta de lanza. La batería de cambios se le indigestó a un equipo que entró al terreno de juego con las piernas agarrotadas y avasallado por un rival con el cuchillo entre los dientes.

Los de Javier Aguirre tal vez no sean el equipo más estético y quizá no tengan posesiones de innumerables pases, pero tienen un pundonor y un carácter que sólo se puede combatir igualando la intensidad. Eso no pasó en el inicio. El Mallorca apretó en las marcas, presionó en campo contrario y a las primeras de cambio se encontró con un regalo de Ter Stegen. El meta germano falló en la salida desde atrás, el balón le fue a parar a Antonio Sánchez y éste le regaló el tanto a Muriqi, que esperaba en el área pequeña la oportunidad para abrir el marcador y dejarle claro a los de Xavi que no iba a ser una noche plácida.

El gol fue una terapia de shock para el Barcelona. Los culés subieron una marcha al choque al ritmo de un Raphinha que a lo largo de toda la primera mitad fue la única amenaza para los locales. El extremo se rebeló contra la falta de frescura de su equipo en la circulación, encaró de forma constante y fue capaz de desordenar a un rival duro como el cemento. De sus botas salieron varios centros peligrosos y el tanto que igualó el choque con un violento zapatazo raso al palo largo ante el que nada pudo hacer Rajkovic.

El propio futbolista brasileño y João Félix pudieron hacer el segundo en pleno intercambio de golpes, pero no lo hicieron y despertaron a un Mallorca que tiró de una jugada de fútbol clásico para castigar las rotaciones en la zaga azulgrana. Balón largo que peina Muriqi y Abdón Prats gana la partida a la defensa para batir a Ter Stegen y mandar a los culés al vestuario por detrás en el marcador.

Tras la reanudación, el Barcelona se preparó para un ejercicio de paciencia. El Mallorca no podía aguantar toda la segunda mitad al mismo ritmo que la primera y optó por ceder metros, reducir espacios y plantar un bosque de minas a los culés. Los de Xavi buscaron soluciones por fuera con las incursiones de Balde y con disparos lejanos que pasaron a ser una tónica habitual. João Felix estrelló el balón en la madera desde larga distancia y el técnico de Tarrasa optó por mover ficha a media hora del final del encuentro dando entrada a Lewandowski por un Ferran Torres inédito en su gran oportunidad como nueve y a Lamine Yamal y Fermín López para aportar frescura.

Los cambios le sentaron bien a un Barcelona que hizo toque de corneta de cara a la recta final del choque. Lamine Yamal entró enchufado y puso patas arriba el encuentro en apenas dos acciones. En la primera Muñiz Ruiz precisó del VAR para no decretar penalti y en la segunda inició una jugada que finiquitó Fermín López en el área pequeña para poner las tablas definitivas y dar la razón a Xavi, que acababa de dar la alternativa una vez más a dos chavales de 16 y 20 años. Entre los dos rascaron un punto que, quién sabe, pueda ser oro dentro de unos meses.