Datos, el mayor secreto de la Fórmula 1

DEPORTES

AFP7 vía Europa Press | EUROPAPRESS

El Centro de Tecnología y Medios, con cientos de cámaras y sensores y la ayuda de socios como Lenovo, permite a los equipos mejorar los monoplazas. En cada carrera recopila 1 TB de información, y prepara nuevas experiencias de realidad virtual.

06 jun 2022 . Actualizado a las 21:12 h.

Hay pocas cosas comparables al rugido de un Fórmula 1, pero los aficionados que no tienen la suerte de poder disfrutarlo en directo tienen a su alcance una de las retransmisiones más complejas del mundo del deporte, que combina docenas de cámaras y gigas de datos de vídeo y telemetría. Es un aspecto fundamental del gran circo del motor, que tiene una audiencia global de más de 8.000 millones de personas a lo largo de toda la temporada. Roberto Dalla es el director del Centro de Tecnología y Medios de la F1, que no solo se encarga de captar las imágenes que luego distribuyen 83 emisoras en más de 130 países; también recopila los datos que necesitan los equipos para desarrollar los monoplazas y mejorar la conducción de sus pilotos.

JAVIER ARMESTO

Dalla, natural de Bolonia y con 33 años de experiencia en la fórmula 1, recibió ayer a varios medios —entre ellos La Voz— en el circuito de Montmeló, donde hoy se correrá el Gran Premio de España. «La Fórmula 1 no solo es el deporte, es un camino para desarrollar el futuro», afirma. Ingeniero electrónico, explica que «para hacer la carrera posible tenemos que poner en cada circuito diferentes equipos, en Barcelona sacamos 70 kilómetros de fibra óptica para conectar todos los sistemas». En este cometido cuenta con varios socios y el más reciente en sumarse a la competición ha sido Lenovo. «Es superimportante para nosotros por tres aspectos —detalla Dalla—. Uno es la productividad, ser capaces de ofrecer nuestro contenido de una forma mejor y más fácil; el segundo tiene que ver con la movilidad, ya que la base del centro de tecnología de la F1 está en Biggin Hill (Reino Unido, a 28 kilómetros de Londres); y el tercero es que tenemos que gestionar un montón de información y con Lenovo lo podemos hacer de mejor manera».

A lo largo de los próximos años, esta alianza permitirá utilizar la tecnología de Lenovo en toda la organización de la Fórmula 1, tanto en su base como en sus operaciones sobre el terreno en las carreras. Los dispositivos de hardware de la compañía china, así como las soluciones de computación de alto rendimiento y de servidores, se integrarán cada vez más en las operaciones de la organización. Desde la ejecución de potentes soluciones de recopilación de datos in situ hasta la producción de contenidos de mayor calidad y el apoyo a las aplicaciones de difusión, la colaboración entre la Fórmula 1 y Lenovo se traducirá en una mejor experiencia para los aficionados.

AFP7 vía Europa Press | EUROPAPRESS

La pandemia del covid afectó al equipo tecnológico de la F1 pero también fue una oportunidad. En el el 2019 movían a 300 personas y 300 toneladas de material de uno a otro país cada dos semanas. Ahora hay 180 personas en el circuito y 120 en el Reino Unido. «Con esta arquitectura hemos puesto los fundamentos del futuro. En unos meses puede que en el circuito solo haya 50-70 personas, hoy hay 27 operadores de cámara en la pista y probablemente en el futuro habrá cero».

A las 24 cámaras fijas hay que sumar las cuatro que van en la carrocería de cada uno de los veinte monoplazas, las de los helicópteros, los cascos de los pilotos, las cámaras aéreas que se deslizan sobre unos cables —como la que recorre todo a lo largo el pit lane—... En total se superan los cien objetivos. «En el circuito se hace una primera dirección de las cámaras fijas. La selección se envía a Biggin Hill, donde se combina con todas las demás tomas y las repeticiones y se distribuye al mundo. Es como ver diez partidos de fútbol al mismo tiempo», asegura. Las dos centrales están conectadas a través de una línea doble de fibra óptica y en caso de emergencia, como ocurrió en Ímola en el 2021, pueden pasar a la transmisión por satélite.

Pero la gran revolución de la Fórmula 1 son los datos. El Centro de Tecnología y Medios trabaja conjuntamente con los equipos, a los que sirve la información que necesitan para mejorar el rendimiento deportivo. «Tenemos un acuerdo superespecial, porque por supuesto los datos son el mayor secreto para el equipo —aclara el italiano—. Nosotros les ponemos la tecnología para transmitir esos datos y les garantizamos que no los compartimos. Cuando yo era más joven, cada equipo tenía su sistema de telemetría. Ahora pueden gastar su dinero en desarrollar el coche». En dicho acuerdo se define qué datos se pueden hacer públicos en las retransmisiones por televisión o en plataformas digitales, como la velocidad, la aceleración o la frenada. ¿Y qué datos son secretos y los recibe directamente la escudería? Pues, por ejemplo, los que aporta un sensor que mide la vibración del motor mil veces por segundo. Otro es el ángulo de deslizamiento, cómo es la posición del coche en cada parte del circuito, si está subvirando o sobrevirando… También la presión del coche hacia abajo para generar el efecto suelo. «Todo esto explica exactamente las características del coche, por eso es secreto».

La clave de este trabajo es la precisión, los monoplazas cuentan con unos 300-400 sensores y su información se pasa a los equipos a través de canales privados. Durante los entrenamientos, la clasificación o la carrera, cada coche transfiere 35 MB de datos cada vuelta. En total, incluyendo el vídeo, el centro que dirige Dalla recopila entre 750 GB y 1 TB de información en cada prueba: «Si no tienes la telemetría tienes un problema, el coche no sale».

Dalla, que fue responsable de electrónica en Ferrari, tiene retos a corto y medio plazo. Entre los primeros, la Fórmula 1 estudia ofrecer tomas aún más realistas mediante las microcámaras en los cascos, pero tienen que hallar un compromiso entre las vibraciones y la definición para una adecuada experiencia audiovisual. Y en un futuro no muy lejano usarán la realidad virtual para que los aficionados que no puedan desplazarse hasta el circuito puedan retar desde la pantalla a los mismísimos Verstappen, Sainz o Leclerc.

Precisamente, la intención de la Fórmula 1 es aprovechar la amplia selección de hardware de primer nivel de Lenovo, así como la innovadora tecnología de última generación, como la realidad aumentada y virtual, para conectar a los aficionados con el deporte de formas nuevas y más atractivas. «La precisión y el detalle marcan la diferencia, y Lenovo estará a la vanguardia para aportar su experiencia y tecnologías innovadoras a nuestras operaciones durante toda la temporada», afirmó Stefano Domenicali, presidente y consejero delegado de la Fórmula 1, cuando se hizo público el acuerdo con la multinacional tecnológica.

Para Yang Yuanqing, presidente y consejero delegado de Lenovo, «esta asociación se basa en nuestra pasión compartida por la innovación, el rendimiento y el espíritu ganador. Juntos, Lenovo y la Fórmula 1 superarán los límites de la tecnología para ayudar a dar forma a un futuro más rápido, más inteligente y más sostenible».