Dani Giménez y lo que toque

DEPORTES

MARCOS MÍGUEZ

El Deportivo ha variado todas sus líneas en cada encuentro posterior al parón

10 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Fernando Vázquez no solo emplea una clasificación particular, que solo registra aquellos partidos que el Dépor ha pasado a su cargo. También se rige por su propio repertorio de frases hechas. «No creo en el refrán. Aunque las cosas funcionen pueden mejorarse», razonaba antes del viaje a Málaga para renegar de la idea de mantener intocable la propuesta que había dado frutos frente al Huesca. «En fútbol te enfrentas cada vez a un contrario que no suele tener nada que ver con el rival al que te acabas de enfrentar», añadía el técnico para refrendar su postura. La que ha convertido a Dani Giménez en la única constante en cada encuentro tras el parón. A partir del meta, inalterable más allá de sus molestias físicas, el once ha variado siempre línea por línea. No ha habido un duelo en el que la zaga, la zona de creación o el ataque no hayan sido reformadas respecto al anterior.

defensa

El peso de Mujaid

Tras el portero, el futbolista con más minutos de césped tras el regreso a la actividad ha sido Mujaid, circunstancia que evidencia el progreso del riojano. Intocable en la zaga de tres, de la que su entrenador no se ha desprendido, solo arrancó en el banquillo el duelo frente al Sporting, al que llegaba recién recuperado de unas molestias. A su lado se ubica otro habitual, aunque solo lleva cuatro citas emplazado en la zaga. Álex Bergantiños ha mudado en hombre libre y el nuevo rol tiene visos de ser definitivo. A la izquierda del capitán arrancan las dudas: allí han probado Ba, Montero y Mujaid. Un baile propagado al carril, que han ido ocupando los dos Ruiz, Mollejo y hasta David Simón, a la sombra de Bóveda en el derecho.

centro del campo

Sin referente tras Uche

La medular es la zona del campo por la que más candidatos han ido pasando, alternándose también con frecuencia durante el desarrollo de las citas. Uche llegó a hacerse necesario, mostrándose como el jugador que más progresó durante el parón, Sin embargo una lesión privó a Vázquez de esta pieza básica y el técnico encontró en Valle un relevo de características casi opuestas. El berciano ofreció minutos de calidad para borrar la imagen de futbolista prescindible que reflejaba el hecho de ser el último deportivista en reestrenarse una vez concluido el confinamiento. Las irregularidades de Gaku, el empleo como zaguero de Nolaskoain (y su posterior lesión) y la falta de ritmo de Vicente han impedido una apuesta más definida en la sala de máquinas.

segunda línea ofensiva

Aketxe precisa respiros

A los candidatos a poblar la divisoria se han sumado Aketxe y Çolak, dependiendo de la fórmula que Vázquez considerara óptima para cada duelo. El vasco ha interpretado un montón de papeles en esta serie de ocho partidos y en todos ha sido protagonista. Solo le ha limitado su necesidad de descanso. El turco ha tenido menos peso y minutos. Mollejo se ha visto beneficiado por una versatilidad y un hambre que no han demostrado Keko o Vallejo.

Frente de ataque

Sabin, el que menos rota

En un conjunto con tan poco gol, los más alternados han sido los puntas. Merino ha esquivado mejor que Santos o Beavue las constantes rotaciones, avalado por su fenomenal rendimiento. Si no se fatigara nunca, la plaza sería solo suya.

Keko no sale del ostracismo previo a la crisis sanitaria

«Lo de las pocas oportunidades y poco protagonismo no lo vamos a negar, estuve cinco partidos y jugué dos ratos». Keko Gonzán salió del parón con una idea en mente: alterar la dinámica previa a la crisis sanitaria, durante la que apenas había contado para Fernando Vázquez. «Es difícil introducir jugadores en dinámica positiva y llegando en el mercado invernal y ahora partimos todos de cero», razonaba el futbolista antes de enfrentarse a la nueva fase de competición.

Un tramo en el que, hasta el momento, nada ha cambiado para él. Es el futbolista blanquiazul con menos minutos de juego tras Koné. Una cláusula de su contrato le impidió actuar en Málaga y antes unas molestias físicas dieron coartada a su entrenador. Un técnico que no esconde que la escasa ración de césped del interior madrileño tiene motivos más allá de las lesiones. «Evidentemente, los jugadores, por sus características individuales encajan siempre mejor en un tipo de sistema que en otro. Sé en qué sistema funcionaría mejor Keko, y es un sistema que no estamos utilizando. No solo el sistema, sino el planteamiento inicial de partido. Es posible que esté sufriendo las mismas circunstancias que sufrió Borja», razonaba el míster antes de viajar a La Rosaleda.

Valle precisó de un reciclaje para ganar peso en el equipo y tras él se volvió tan importante que Vázquez ya ha reclamado públicamente poder seguir contando con él de cara al próximo curso. El contrato de Keko en A Coruña alcanza esa campaña 2020-2021. Quizá para entonces el Dépor maneje un esquema en el que consiga encajar.