«El club español viajó a Anfield para un encuentro de la Liga de Campeones el 11 de marzo, y miles de sus seguidores se unieron a ellos en el viaje a Liverpool. En ese momento, Madrid ya estaba experimentando un brote agudo de coronavirus y el Atlético de Madrid había recibido la orden de jugar partidos en su propio terreno a puerta cerrada», recordó. «Muchos cuestionaron la decisión en ese momento, pero la UEFA y el gobierno del Reino Unido no impusieron ninguna restricción para que el partido se desarrollase normalmente», señaló en palabras a este mismo diario, algo que también recordó el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo.
El mandamás colchonero restó importancia a las críticas en una entrevista con Radio Marca. «Nosotros fuimos a Liverpool porque teníamos que jugar allí, y como no lo prohibieron, teníamos que jugar allí. Si nos dicen que no teníamos que ir, no hubiéramos ido», apuntó Cerezo.