Los Warriors se dan una vida más al ganar a los Raptors en Toronto

juan pablo pérez arce REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Dan Hamilton

NBALos canadienses tuvieron en la última posesión la oportunidad de sellar el título

12 jun 2019 . Actualizado a las 11:14 h.

La remontada de los Raptors fue incompleta. En un final repleto de emociones, los Warriors de Golden State sobrevivieron a la embestida liderada por Kawhi Leonard y forzaron un sexto juego, tras imponerse por 105-106 en Canadá. Desde el comienzo, los Warriors fueron los dominadores del partido, impulsados por la imperiosa necesitad de ganar para evitar que Marc Gasol (17 puntos, 8 rebotes y 2 asistencias), Serge Ibaka (15-6-1) y compañía, sentenciaran la serie y obtuvieran su primer anillo de la NBA.

Por eso, Steve Kerr decidió incluir en el quinteto inicial a Kevin Durant, que regresaba al equipo tras más de un mes fuera de las pistas. En un gran primer cuarto, el alero registró 11 puntos. Además, Stephen Curry y Klay Thompson estuvieron encendidos. El trío tuvo un inicio implacable: de las primeras siete canastas, cinco fueron triples. El comienzo no podía ser mejor para los visitantes.

La lesión de Durant

Más allá de la superioridad de los Warriors, los Raptors lograron mantener cierta paridad y gracias a los 10 puntos del español Marc Gasol, cerraron el primera cuarto con una desventaja de solo seis puntos (28-34). No obstante, el partido no duró mucho más para Durant, quien abandonó la pista luego de intentar driblar ante la marca de Serge Ibaka, excompañero en el Thunder, y de caer al piso.

El jugador del equipo de Oakland abandonó el estadio en muletas, y se prevé que ha sufrido una lesión en el tendón de Aquiles. Con la imprevista salida de Durant, Kerr decidió enviar a la pista a DeMarcus Cousins. El pívot ingresó de muy buena manera y cosechó 9 puntos y 5 rebotes en solo seis minutos.

Curry (31-8-7) y Thompson (26-6-4) parecieron no flaquear ante la lesión de su compañero, sino todo lo contrario. Más allá de que el segundo y el tercer cuarto terminaron en paridad (28-28 y 22-22, respectivamente), los «splash brothers», junto al antes mencionado Cousins, fueron los encargados de que los Warriors mantuviesen la diferencia obtenida en el primer período hasta los minutos finales del encuentro. 

Pese a ello, poco a poco los Raptors comenzaron a apretar a los visitantes, encabezados por un Kawhi Leonard que, hasta el momento, no estaba teniendo el papel rutilante que había mostrado en los partidos anteriores de la serie. A falta de cuatro minutos para la finalización del juego, los Raptors lograron dar vuelta el resultado y se colocaron 98-95.

Parecía que era el momento para los locales: se encontraban en las puertas del campeonato. Una ráfaga de 10 puntos de Leonard permitió a los Raptors obtener su mayor diferencia en la noche y se adelantaron por 103-97.

Un trepidante final

El estadio era una caldera. Sin embargo, tras lograr la remontada, los locales no pudieron mantener la ventaja conseguida. Una serie de errores de los Raptors le dieron la posibilidad a los Warriors de volver al juego. Y los de Oakland no lo desaprovecharon. Curry y Thompson sacaron a relucir su carácter de campeón y con tres triples al hilo, volvieron a adelantar a su equipo, esta vez por 103-106.

A falta de treinta segundos para la finalización del juego, y luego de un tapón ilegal de Cousins, los locales quedaron a tiro del empate. Por si fuera poco, una falta en ataque, con Cousins otra vez como figura central, le dio la posesión final a Toronto. El anillo estaba tan cerca. Y tan lejos. Una jugada separaba a los Raptors y a toda Canadá de lograr una conquista histórica.

Leonard, que finalizó el partido con 26 puntos, 12 rebotes y 6 asistencias, encabezó la posesión y parecía que nadie le quitaría el tiro decisivo al exjugador de los Spurs de San Antonio, pero el alero le cedió el balón a Fred VanVleet y este a Kyle Lowry, quien falló el triple que le hubiera dado el campeonato a los Raptors.

Con la serie 2-3 a favor de los canadienses, el Oracle Arena se dará el gusto de albergar el viernes el último partido de NBA de su historia, en el que los Warriors buscarán forzar un séptimo partido, que se disputaría en la madrugada del próximo lunes en Toronto.

Durant: lesión, agente libre y futuro incierto

Durante el sexto partido de las finales de la NBA, el jugador de los Warriors de Golden State sufrió una lesión en el tendón de Aquiles de su pierna derecha que lo alejaría de las canchas por lo que resta de la temporada.

Durant volvía a las pistas tras sufrir una lesión en el gemelo de su pierna derecha durante las semifinales de la Conferencia Oeste, en la que su equipo superó a los Rockets de Houston.

La presencia del alero en el quinteto inicial fue una sorpresa. El alero había apurado la rehabilitación para poder jugar y para ser parte de las finales de la NBA

En el tiempo que logró mantenerse en la pista, tuvo una excelente actuación: en 12 minutos cosechó 11 puntos y dos rebotes.

Más allá de la lesión sufrida, que lo mantendría varios meses alejado de las competiciones, se abren interrogantes acerca de lo que pasará con el exjugador del Thunder de Oklahoma City.

La cuestión es que el contrato de Durant con los Warriors finaliza el próximo 30 de junio y el jugador, de 29 años, se convertirá en agente libre.

Los Knicks, al acecho

Varios equipos, como los Knicks de New York, habían comenzado a realizar los ajustes necesarios en su presupuesto para tentar a Durant y para ofrecerle el máximo salarial. A partir de la lesión del dos veces campeón de la NBA, las cosas parecen cambiar: la incertidumbre sobre su estado físico y la colosal inversión que debería destinarse para contar con sus servicios hará que los potenciales destinos de Durant se replanteen si merece la pena hacer un esfuerzo por contratarlo o no.

En lo que va de la postemporada, Durant promedia los mejores números de los Warriors, con 32.3 puntos, 4.9 rebotes y 4.5 asistencias.