Sin alma y sin goles en el empate entre Barça y Huesca

Jesús Ballesteros COLPISA

DEPORTES

ALBERT GEA

Un Barça irreconocible en el que futbolistas como Wagué, Todibo o Boateng fueron titulares no pasa de las tablas ante el colista de Primera

13 abr 2019 . Actualizado a las 19:55 h.

Mientras los pesos pesados del Barcelona disfrutaban de un merecido descanso de cara al choque trascendental de Champions del martes, un sucedáneo de equipo sacaba un punto ante el Huesca, el colista, que no dejaba contento a nadie tras uno de los partidos más sosos y apáticos que se le recuerdan al líder de la competición. Eso sí, las tablas sin goles permiten al vigente campeón sumar una jornada más, y van 20, sin perder en esta Liga. Más allá de la vestimenta salmón, al Barcelona que saltó al verde de El Alcoraz no lo reconocía ni la madre que lo parió. Pero bastaba con echar un ojo a las circunstancias y al contexto del choque para entender la revolución que llevó a cabo Ernesto Valverde. La racha del equipo aragonés y la distancia de 49 puntos entre ambas escuadras invitaban a dar descanso a estrellas y titulares, pero es que además el líder, con hasta 11 puntos de ventaja sobre el segundo clasificado, se enfrentaba al colista. Y, en el horizonte, el choque de vuelta de los cuartos de final de Champions ante el Manchester United. Expuesto esto, algunos de los jugadores que dicen pelear por un sitio en el once de gala de este equipo dejaron meridianamente claro, si no lo habían hecho ya antes, las razones por las que Valverde no les da más bola de inicio. El partido de los Dembélé, Boateng o Malcom, por mencionar a los encargados de generar algo de peligro, es para regalar al enemigo más cercano.

Salió el Barça repleto de canteranos, novatos y suplentes, pero aún así poco problema tuvo que soportar ante un Huesca muy justo y cuya permanencia en la élite se antoja complicada. Pese a que el rival fuese el Barcelona, un equipo con el agua al cuello debe mostrar algo más de sangre en el verde. Su desidia, incapaz de tirar con peligro entre los tres palos durante todo el choque, dice mucho de él. Qué lejos quedan ya esas primeras jornada de un equipo valiente y decidido que fue capaz de enmudecer incluso al Camp Nou.

Santamaría mantuvo a los suyos con vida antes del descanso. No es que se prodigase en exceso el conjunto culé en tareas ofensivas, pero Dembélé y Murillo tuvieron en gol con apenas unos segundos de diferencia. Riqui Puig sacó su magia a relucir para habilitar al francés que fue incapaz de batir al portero local en un uno contra uno de manual. Murillo, tras el saque de esquina posterior a esa jugada, se elevó por encima de todos, pero tampoco fue capaz de romper la baraja.

El partido no fue especialmente atractivo. Se echó en falta algo más de ambición por parte de los locales que se jugaban la vida. El Barça estaba cómodo, sin presiones, sabedor del margen que tiene y cargado de no habituales. En esas andaba el choque cuando Malcom estrellaba el cuero en el palo y dejaba a los locales otra vez con el nudo en la garganta, conscientes de que eran ya muchas las que ocasiones de las que se estaban salvando.

Pero el Barça acumulaba muchos jugadores por el centro y adolecía de la profundidad y rapidez necesaria para terminar resolviendo el choque. Futbolistas como Dembélé volvían a desaprovechar una nueva oportunidad de demostrar que son capaces de liderar el equipo aunque sea en este tipo de envites. Nada aportó el francés más allá de errar una de las ocasiones más claras del partido. Como él, otros muchos que nada distinto hicieron durante el duelo para doblegar al colista. Menos mal que el martes regresa la Champions.

Ficha técnica:

SD Huesca: Santamaría, Miramón, Etxeita, Pulido, Javi Galán, Juanpi (Melero, min. 60), Rivera, Moi Gómez, Avila (Gallar, min. 88), Enric Gallego y Ferreiro (Hernández, min. 72).

FC Barcelona: Ter Stegen, Wagué, Murillo, Umtiti, Todibo, Vidal, Aleñà (Arthur, min. 80), Riqui Puig (Jordi Alba, min. 67), Malcom, Dembélé (Coutinho, min. 67) y Boateng.

Árbitro: Cuadra Fernández (balear). Amonestó a Todibo, Wagué, Pulido.

Incidencias: Estadio de El Alcoraz. 7.600 espectadores.