Tarde de baloncesto desde la grada

X.R.P., MARTA DE DIOS LUGO / LA VOZ

DEPORTES

REBECA

La plantilla del Breogán se relajó viendo al Ensino superar al Segle XXI en la última jornada de LF2

15 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Pocas veces se vio a la plantilla del Cafés Candelas Breogán tan relajada en el Pazo. Los jugadores de Natxo Lezkano aprovecharon ayer por la tarde para disfrutar del baloncesto femenino. El Ensino recibía en casa al Segle XXI a las 19.00 horas, en el último partido de la temporada de la Liga Femenina 2. Tras una segunda vuelta intratable, con 14 victorias consecutivas, las rojillas certificaron hace semanas su presencia en la fase de ascenso que se disputará en Valencia dentro de dos semanas. Las de Juan Nécega recibían a una de las colistas de la categoría, que se jugaba la vida por no descender.

Los jugadores, algunos uniformados con el chándal del Breogán, se sentaron juntos, cerca del banquillo local. El Ensino se hacía pronto con las primeras ventajas y el Segle, peleando por la permanencia, se resistía a perderle la cara al partido. La mayoría seguía el partido con atención, alguno consultaba el teléfono de vez en cuando o atendía a algún aficionado que se acercaba a saludar. Poco antes del descanso, las lucenses ya ganaban de diez y se dispararon con varios triples consecutivos de Raquel Asensio. Aplaudían los jugadores del Breogán, con Salva Arco, el capitán, a la cabeza. Aunque sin duda uno de los que más disfrutaba era Johan Löfberg. El alero sueco, pertrechado con unas gafas de sol, no dejaba de bromear con sus compañeros. Matt Stainbrook, uno de los más concentrados en el juego, seguía el partido con la vista fija en el parqué, una gorra calada y sus gafas inseparables.

Muchos decidieron irse a descansar al ecuador del partido, cuando el duelo lo tenían las rojillas muy decantado (46-29). Al fin y al cabo, el día había sido largo y la noche muy corta.

Un pasillo como homenaje

Antes del partido, el Ensino le hizo pasillo al Breogán. Las rojillas, que también aspiran al ascenso de categoría, homenajearon a los jugadores celestes que el viernes consiguieron su billete directo a la ACB.

«Este ascenso es diferente, fue una temporada muy completa», dice Ricardo Uriz

«Estoy muy feliz. Cuando fiché fue con el objetivo de ayudar a este equipo a regresar a la ACB después de 12 años. Ahora subimos y estoy muy orgulloso por todo el trabajo de la plantilla», dice Ricardo Uriz. El base ya participó en varios saltos de categoría, y apunta que «cada ascenso es especial y distinto, pero este es diferente, ya que supone cerrar una temporada muy completa en la que ascendimos, ganamos la Copa Princesa, logramos una racha de 11 victorias consecutivas y solo perdimos un partido en casa. Lograr todo esto es dificilísimo y confirma la gran actuación del equipo», añade. El jugador quiso destacar también el respaldo de la gente a lo largo de toda la campaña: «El apoyo de la grada fue fundamental y la ciudad se lo merecía».