La escuadra más goleadora, abierta al regreso de locales que juegan fuera
11 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Lalinense acaba de cerrar una campaña en la que se quedó fuera de la fase de ascenso por apenas dos puntos. Pero es una temporada con cifras importantes, como ser la escuadra más goleadora del grupo A de Primera Nacional con 907 tantos a favor ?30,2 de media por partido?, y fue el cuarto menos goleado, con 745 en contra. Fueron 24 partidos ganados, cinco derrotas y un empate. Son números que resumen esquemáticamente una temporada que se valora en términos positivos en el seno de la entidad.
Sobre todo por la gran progresión del equipo, que hubo de asimilar las nuevas ideas de un nuevo técnico, Milucho, que tendrá continuidad en la próxima campaña. Desde la directiva señalan que la escuadra cumplió con su premisa de competir con seriedad todo el año, «e fixérono perfectamente, mantendo as súas opcións ata o final». En cuanto a los puntos logrados, señalan que reflejan la igualdad del grupo, y aunque hay satisfacción por lo conseguido con un conjunto integrado por jugadores de la cantera, es inevitable pensar en alguno de los partidos que se escapó y que hubiera podido dar el premio de jugar la fase.
Pero no hay reproches: «Xa nos adestramentos se vía a intensidade coa que se traballaba. Foi unha temporada larga, con xente que vén de traballar, non son profesionais, e practicamente non faltou xente, agás algún por cuestións laborais». Un trabajo realizado por un bloque compensado, en el que se pese a ser el equipo más anotador, hay que buscar al más goleador en el puesto décimosexto: Ramón, con 135 tantos en 26 partidos.
Desde el Lalinense dan una clave: «Destacou máis o grupo que as individualidades. O máis anotador foi un extremo, porque o equipo traballou moito ao contraataque, dou moita continuidade en ataque para finalizar os extremos». La consecuencia es que el equipo no dependió de ningún jugador concreto, fue un grupo solvente que supo superar las lesiones que afectaron sobre todo a la primera línea, con bajas como las de Porto, Asier o Roberto Álvarez.
Con el equipo enfrascado en la preparación de la cena del viernes y el sector cadete, es pronto para hablar de altas y bajas. Pero la entidad tiene claro que busca mantener el solvente bloque que firmó una campaña con aspiraciones hasta la última jornada. Hay alguna duda como Josiño, pendiente de operarse el menisco y con ocupaciones laborales, y el club mantiene la puerta abierta a la posible incorporación de jugadores de casa que militan fuera. Nombres como Uxío, José, Román, Aarón o Novo, para mantener la filosofía del Lalinense, de conformar la plantilla con gente del club, huyendo de fichajes estrella.