Los de Emilio Palacio lucharon cada balón, pero la falta de acierto hizo que los rivales se llevaran el partido por 3-1
26 mar 2017 . Actualizado a las 05:10 h.Los jugadores del Club Náutico Boiro sabían que el viaje hasta Tarragona implicaba un serio desafío. Un reto de la misma magnitud que la liguilla de la fase de ascenso en la que están inmersos. Por ello, salieron armados de determinación y dispuestos a dejarse hasta las huellas dactilares en cada jugada contra el Sant Pere y Sant Pau. Y así fue, los locales asistieron a un auténtico y reñido espectáculo, solo que no fue suficiente para traerse la victoria, que cazaron los rivales con un marcador final de 3-1.
El primer set ya se tornó complicado para los de A Cachada, que intentaron luchar hasta el final, pero finalmente los locales firmaron un 25-22 difícil de remontar. En el segundo, las tornas cambiaron, ya que fue el Náutico Boiro el que estuvo arriba siempre en el marcador hasta alcanzar el 26-28. Las cosas se pondrían peligrosas en el tercer juego, donde los adelantamientos constantes acabaron cayendo en manos del Sant Pere, con un 32-30.
Partido equilibrado
El cuarto set y el decisivo no supuso ningún cambio del partido hasta ese momento. Mas la falta de acierto de los de A Cachada acabó traduciéndose en un 25-23 final.
El entrenador de los boirenses, Emilio Palacio, confirmaba al término del encuentro que se trató de un partido más igualado que el de la ida, «pero es lo que tienen los partidos igualados, pueden irse para cualquier lado».
Palacio y los suyos se marcharon dolidos por la derrota, pero con el sabor dulce de haber cumplido hasta el final. Ahora todos los ojos están puestos en el siguiente partido contra el Intasa San Sadurniño.