Nadal se apoya en el «drive» ante Monfils para volver a cuartos de un grande
24 ene 2017 . Actualizado a las 11:34 h.Rafa Nadal regresa al pasado para asegurar su futuro. Ya está en cuartos del Open de Australia (Eurosport), un pequeño paso en su trayectoria, pero una zancada en la reconquista de sus mejores prestaciones. Porque no alcanzaba la antepenúltima ronda de un grand slam desde hace año y medio, cuando jugó la de Roland Garros. Lució ayer en la Rod Laver Arena una derecha que recordó a la de sus buenos tiempos y la fiabilidad de siempre. Así superó a Gael Monfils, al que arrancó 64 errores no forzados. El mallorquín necesitó otro partido que se estiró hasta casi tres horas, hasta terminar venciendo por 6-3, 6-3, 4-6 y 6-4. Así avanza ahora el ganador de 14 grandes camino de los 31 años. Y necesita que su tenis recupere veneno para los tres partidos decisivos que le pueden hacer campeón, el primero contra Milos Raonic, verdugo ayer del también español Roberto Bautista por 7-6 (6), 3-6, 6-4 y 6-1.
Raonic, gigante canadiense de 196 centímetros, irrumpió en el circuito hace un lustro envuelto en un cliché: sacador y jugador de ataque. Pero su tenis acabó rompiendo aquellas costuras y ya rinde como los mejores en partidos de desgaste. Por eso le ganó a Nadal en Brisbane hace dos semanas, aunque el global de sus enfrentamientos sonríe al español, que le superó en Abu Dabi a finales de diciembre.
Mientras, su camino hacia la final, tras la eliminación de Novak Djokovic, sigue despejándose. Si gana mañana a Raonic, se enfrentaría en semifinales al vencedor del partido entre el belga David Goffin, que eliminó ayer al austríaco Dominic Thiem, y el búlgaro Grigor Dimitrov, que apeó al uzbeco Denis Istomin, verdugo de Djokovic la semana pasada.
«Si no soy agresivo contra Raonic, estoy muerto», dice de la cita de mañana
A la derecha de su tío y entrenador de siempre, Toni Nadal, Rafa Nadal cuenta ahora con los consejos de Carlos Moyá. El nuevo miembro de su equipo fue uno de los entrenadores que acompañó la progresión más reciente de Milos Raonic, el rival del mallorquín en cuartos.
Nadal tiene claro el plan ante Raonic. «Necesito estar muy concentrado con mi saque y jugar agresivo. Si no lo soy, estoy muerto», resumió. Y recordó un instante de su último partido ante el canadiense. «Hay que estar agresivo en todo momento. En Brisbane lo llevaba bien y en un momento dado dejé de jugar igual de agresivo 15 minutos, me hicieron dos roturas y me fui a casa», explicó.
Nadal matizó el perfil de su rival. «Raonic, aparte de que saca fantástico, el top 2 del mundo sacando, desde el fondo juega bien y es complicado», radiografió de cara a mañana.