¿Por qué Florentino no dimite?

francisco pastor REDACCIÓN/ LA VOZ

DEPORTES

JUAN MEDINA | REUTERS

Los seguidores blancos lo han señalado tanto en el derbi como durante los últimos días de Benítez como entrenador 

29 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los seguidores blancos lo han señalado tanto en el derbi como durante los últimos días de Benítez como entrenador del conjunto blanco, pero Florentino Pérez sigue atado a su sillón en el palco del Santiago Bernabéu. Los interrogantes sobre su figura no dejan de crecer.

¿Por qué Florentino no deja la presidencia del Real Madrid ?

Lo explicó Emilio Butragueño una vez con meridiana claridad: se siente un ser superior. Y su junta directiva le consiente todos los desatinos, por eso son corresponsables de la falta de gobierno en el que ha sumido al club. Florentino, como Cristiano, entiende que no hay nadie de su nivel para sentarse en el palco, ese escaparate tan jugoso para hacer negocios multimillonarios. Por el Bernabéu pasan desde jefes de estado hasta responsables de grandes compañía multinacionales. Es el lugar perfecto para cerrar acuerdos a los que de otro modo sería imposible dar cuerpo.

Además, la reforma de estatutos que impulsó y que endurece las condiciones para ser candidato a la presidencia del conjunto blanco hacen que la nómina de posibles sucesores se haya achicado al máximo.

¿Por qué no es capaz de delegar la dirección deportiva?

Porque como muchos altos directivos, Florentino se cree que sabe de todo y de fútbol, por su puesto, también. Por eso fue capaz de asegurar que Luis Suárez era un jugador del montón o de pagar cien millones de euros en Gareth Bale.

¿Por qué cambia de entrenador con tanta frecuencia?

Porque es incapaz de hacer un análisis sobre cuestiones futbolísticas. La principal evaluación que le impone a sus entrenadores tiene que ver con su relación con los jugadores. Mourinho cayó porque el vestuario lo había abandonado. Ancelotti, como antes Del Bosque, por todo lo contrario: mimaba demasiado a sus chicos que se estaban acomodando bajo la batuta del italiano. Benítez tampoco tenía tacto con los futbolistas.

Pero bajo esa constante permuta de entrenadores también se oculta un movimiento estratégico, el de tratar de responsabilizar a otros de sus propios fracasos. Mientras el debate sea en torno a la figura del técnico no se cuestiona la del presidente. Sin embargo, todo apunta a que el movimiento lo ha repetido con demasiada asiduidad y ya nadie se traga esa cortina de humo. Ahora intentará disparar contra los jugadores, pero lo cierto que el máximo responsable del desastre del Real Madrid tiene nombre propio: Florentino Pérez.

¿Por qué no se plantea la venta de Cristiano Ronaldo?

Porque Florentino descifra el fútbol en cuestión de ingresos y gastos y, por el momento, Cristiano es una fuente de recursos importante. Ese modelo de negocio que ha implantado en el club está enganchado a la mercadotecnia. Sin ella, los dispendios megalómanos no serían posibles. Por eso, en el Madrid, se habla demasiado de vender camisetas.