Con demasiado miedo a perder

Iñaki Sáez

DEPORTES

12 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

No es sencillo jugar contra el Atlético de Madrid. Tiene, como viene siendo habitual en la era Simeone, las cosas muy claras. Presionó arriba durante los primeros minutos y cuando las fuerzas fueron desapareciendo, se quedó protegido en su campo esperando que una jugada a balón parado o una contra le diese los tres puntos. Llegó a acumular hasta diez futbolistas por detrás de la pelota y para romper semejante barrera hay que estar muy entonado. Y quizás el Barça no lo estuvo. A algunos de sus mejores hombres en las últimas jornadas les faltó brillo. Fue otra consecuencia del despliegue táctico del Atlético. Esperando con tanta gente replegada, minimiza las oportunidades para los amantes de los espacios, para aquellos que viven de las arrancadas y del uno contra uno.

Pero tampoco el conjunto de Martino quiso arriesgar en exceso. Le costó exponerse durante todo el choque. Había en los dos equipos demasiado miedo a perder. Si uno de los dos hubiese perdido, habría quedado psicológicamente tocado. Por eso, a ninguno de los dos se les veía descontentos con el resultado. Saben que han quedado indemnes y que tienen otra oportunidad durante la segunda vuelta para arreglar cuentas. En este sentido, creo que el partido del Camp Nou será diferente. Espero, por el bien de la competición, que para entonces la Liga aún no esté decidida. Me gusta la idea de que el Atlético se cuele entre los grandes, que les dispute el campeonato. Lo hace mucho más atractivo que en estas últimas ediciones donde se había convertido en algo bipolar.

En definitiva, el 0-0 del Calderón me pareció justo, porque ni Atlético ni Barça apostó de forma notable por la victoria. Estuvieron más pendientes de no perder, de no acabar sobre la lona. Esto le da algo de oxígeno al Real Madrid, que recupera el pulso por la Liga. Ya está a solo tres puntos y aún queda un mundo para que esto acabe.

Y confío que lo de Iniesta no sea nada. Es un hombre trascendental para la selección. El pase que le dio a Alexis, que estaba en fuera de juego, resume a la perfección el talento que tiene el jugador manchego para ejecutar acciones que otros no pueden. Sería una lástima perderlo.