El COB logra su primera victoria en casa ante Huesca (82-78)

jacobo rodríguez OURENSE / LA VOZ

DEPORTES

Santi M. Amil

Los dos primeros cuartos sentenciaron al Huesca

18 nov 2012 . Actualizado a las 02:40 h.

Y llegó la primera victoria. Hicieron falta siete partidos para ver ganar al COB y lo hizo demostrando que hay al menos un equipo peor que los ourensanos. Huesca dejó claro en el Pazo que su victoria y la forma de conseguirla fue una mera anécdota. Costa apostó por una táctica un poco suicida y puso en bandeja que el COB desde el inicio jugase a placer en ataque con las facilidades defensivas oscenses y todo fue demasiado fácil hasta el descanso, el tiempo suficiente para abrir un hueco que permitió capear el habitual mal momento de cada partido.

La receta de los cobistas fue aplicar la lógica. Aprovechó las pérdidas de balón y las dificultades para bajar a defender de Huesca con canastas fáciles de Barbour y Julio González, Mena abrió la caja de los truenos desde el 6,75 y Kedzo lo secundó con un recital sin fallo y el propio Julio González aprovechaba su superioridad cuando posteaba para anotar con facilidad. Así se consiguió un 20-9 a falta de 4:30 para acabar el primer cuarto y en los oscenses ni Cebular ni Samuels, sus mejores referencias tenían el día. El resto para olvidar.

Desde ese momento el choque discurrió por los mismos derroteros y con cómodas ventajas locales, que alcanzaron una máxima de 15 puntos al comenzar el segundo cuarto, en el que apareció Ogide en la zona cuando Costa desde el perímetro frenaba la sangría de Huesca.

El equipo cobista dirigido por Rafa Sanz jugaba a placer, aunque por momentos los dos equipos ofrecieron destellos de muy poca calidad y demasiadas imprecisiones. La conclusión al descanso era clara. Máxima anotación de la temporada, 45 puntos, excelentes porcentajes de tiro y victoria cómoda (45-34).

El bajón de siempre

Pero el descanso sentó muy mal al COB. Anotó un punto en los primeros cuatro minutos y Mena protagonizó su habitual recital de errores de cada partido y sembró las dudas en el equipo y en la grada. Pero en cuanto se fue al banquillo el equipo tiró de casta con Rai López en la dirección, que se hizo dueño del choque y del ritmo del mismo, Barbour en el perímetro y jugadores menos habituales como Serrano y Múgica que dieron un plus para conseguir llegar al final del cuarto con la misma renta que al descanso (65-54).

En esta ocasión los errores y la falta de confianza de los cobistas no pasaron factura en el marcador final. El último cuarto se vivió con tranquilidad en la grada, hasta que Mena volvió a salir a la pista que provocó de nuevo las dudas en el final de partido y por fin cayó la primera victoria. El Pazo respiró y el COB deja de ser colista.