A falta de conocer los tiempos de paso de cada uno de los parciales del doble hectómetro, el análisis de esta histórica final, por los registros y el triplete conseguido por los jamaicanos, apunta hacia una buena salida de Usain Bolt dentro de sus cánones, en la salida de la curva se hizo con dos cuerpos de distancia sobre Blake y aunque en el tercer parcial hubo un momento crítico, al final incluso se permitió el lujo de una desaceleración antes de entrar en la línea de meta.
primera fase
La salida y la aceleración
La comparativa visual de la eficacia de la salida que se inicia en curva se establece con la calle siguiente o anterior. Bolt redujo la compensación con su compatriota Weir ya en los primeros 25 metros de carrera. A pesar de ello, su salida no fue un prodigio pero su fase acelerativa fue buena. Lo suficiente como para liderar la primera parte de la prueba con cierta holgura. Pero mi impresión es que lo consiguió a costa de un excesivo derroche energético. Su tiempo de reacción fue el tercer peor de todos los finalistas (0,180 s), más alto que en la final del hectómetro (0,165). Pero esta circunstancia suele ser normal en las distancias superiores. Por otra parte, el tener a Blake por el interior le impedía tener referencias visuales y no podía descuidarse.
inicio de la recta
Incertidumbre en el tercer parcial
Ese empeño muscular que exige la fase de aceleración, encarecido por desplazarse en curva, permitió a Bolt situarse unos 2 metros por delante de Blake al principio de la recta. Sin embargo, no tuvo la frescura de otras ocasiones cuando se encuentra en fase de mantenimiento de la velocidad. A falta de datos oficiales sobre los parciales entre el 100 y 150 metros, creo que Blake lo corrió más rápido que él. Es probable que esa lesión que padeció el astro jamaicano se notase más en esta prueba que en el hectómetro. Por un instante, parecía que Bolt podría ser derrotado. Pero fue capaz de mantener la mínima distancia en relación a su delfín.
comparativa
Idéntica velocidad media que en el hectómetro
La velocidad media conseguida en la final de 200 metros (10,35 m/s) por el vencedor fue prácticamente la misma que tuvo en el hectómetro (10,38 m/s) de estos Juegos. En atletas entrenados para afrontar estas distancias, es habitual que así sea. Incluso, en especial para los que poseen una deficiente salida, podría ser superior esta velocidad media en los 200 metros, ya que la segunda parte de esta prueba es más rápida que la primera. En consecuencia, Bolt ha sido capaz de doblar el registro de su última actuación en el hectómetro (9,63+9,63) y perder tan solo 0,06 s. Bien es cierto que en sus tres últimas zancadas se desentendió de aplicar fuerza para saborear ese histórico momento. Sin embargo, en el caso de Blake no solo dobló su marca de la final de 100 metros (9,75), sino que a este resultado le rebajó 0,06 segundos.
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