Cambio de vida
El contacto con el conjunto saudí surgió a través del fisioterapeuta Carlos Alonso, con el que coincidió en la universidad y en el Pontevedra. Conoce su trabajo y lo recomendó tanto a Raúl Caneda como a la directiva.
Yago Iglesias está muy contento con la oportunidad que se le presenta y al mismo tiempo asustado por el cambio de vida. El pobrense se dio cuenta rápidamente de que dar patadas no era lo suyo, por lo que cambió de lugar y se pasó al banquillo. Entrena desde hace nueve años y ahora podrá ver cumplido su sueño, vivir de este deporte.