Fernando Alonso regala ilusión

Ignacio Encabo / Dpa

DEPORTES

Vestido de rey mago, se muestra esperanzado con el nuevo coche para el 2012.

19 dic 2011 . Actualizado a las 21:30 h.

En un día en el que acabó vestido de rey mago, Fernando Alonso regaló ilusión a los fans de Ferrari de cara a la temporada 2012 de Fórmula 1, en la que se mostró esperanzado en «saborear victorias y recuperar sensaciones». El piloto español tuvo una jornada ajetreada en Madrid: recibió un premio, atendió a la prensa y acabó cambiando el mono rojo de Ferrari por la capa de Melchor para repartir obsequios entre los niños.

«Estoy muy motivado de cara al año que viene pero hay que ser cautos en esta parte de la temporada», señaló el piloto de Ferrari, que aseguró que «hay una sobredosis de optimismo en todos los inviernos de Fórmula 1». Y este invierno, aunque en el plano climático sí es diferente, no es dispar a otros años en el mundo del motor. Mejoras por aquí, túneles del viento por allá, unos retoques en los alerones y la ilusión entre los ferraristi se dispara.

«El optimismo viene por el cambio de mentalidad que ha habido en Ferrari desde junio. Se adoptaron algunas medidas que otros años no se hubieran tomado», reveló el piloto de Ferrari, que recibió antes el Premio Internacional del Deporte de la Comunidad de Madrid. «Pero hay que ser cautos en esta parte de la temporada», señaló el español, que pasó recientemente cuatro días en Maranello, el hogar de la Scuderia.

«No podemos estar contentos con la temporada: ni individualemnte ni colectivamente. Hay mucho que mejorar», aseguró Alonso, que dio la bienvenida al finlandés Kimi Raikkonen a la Fórmula 1. «Es una persona fantástica, va a ser un placer. No es lo mismo tener al lado a Kimi que a un novato. Da otra sensación y otra seguridad», dijo.

Alonso recomienda «desconectar, porque si no es imposible llegar al cien por cien». Un poco de fútbol, de consola y de bicicleta ayudan a Alonso a olvidarse de la competición. Aunque la temporada comienza en Jerez con los primeros test, Alonso reconoció que espera con «un poco de ansiedad» el Gran Premio de Australia, que inaugura la temporada el 18 de marzo.

A la derecha del trono que ocupó Melchor Alonso estaba Marc Gené, piloto probador de Ferrari, y a su izquierda Pedro de la Rosa, que correrá el año que viene en el equipo Hispania. Gené, que hizo de Baltasar, y De la Rosa, de Gaspar, respondieron junto a Alonso a las preguntas, del todo insospechadas, que realizaron los niños. «¿Prefieres que gané el Madrid o que lo haga Alonso?», le preguntaron a De la Rosa, que no daba crédito.

Entre risas, los tres pilotos españoles, que derrocharon simpatía, fueron regalando un Scalextric de Ferrari a cada pequeño que se animaba a preguntarles.

Mientras la timidez se apoderaba de algunos de ellos, otros no dejaron pasar la oportunidad de dar la mano a Alonso o dar un beso a Gené y De la Rosa.

«¿Y qué le habrá pedido a los Reyes Fernando?», se preguntarían muchas personas en la sala. Una niña atrevida acabó lanzándole la cuestion al piloto.

«Una bicicleta», contestó sincero el español, que la podrá utilizar como vehículo hacia la desconexión mental que propone antes de un año que el mismo prevé «más igualado».