Albert Park calienta la parrilla

Mariluz Ferreiro REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

El campeonato arranca en un circuito difícil, de firme cambiante y muy exigente con los frenos

25 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La historia dice que Albert Park no suele ser pasto del aburrimiento. El Mundial 2011 iba a nacer en Bahréin, pero debido a las revueltas en este país verá la luz en Melbourne, en un trazado complicado. Semiurbano, bacheado, con agarre limitado, curvas lentas, y muy exigente con los frenos de los monoplazas. Un trazado que cambia a cada jornada, que en los libres puede ser propicio para un equipo y en la carrera resultar ideal para otra escudería. Porque se va limpiando el asfalto de la suciedad acumulada, pero también se va depositando en la pista goma procedente de los neumáticos. Y porque el tiempo allí, a estas altura de año, es un tanto inestable. Aunque según las previsiones meteorológicas de la organización, los entrenamientos y la carrera de este gran premio se celebrarán bajo nubes y claros. Un buen escaparate para el arranque del campeonato.

Melbourne acoge el Gran Premio de Australia desde 1996. Pero ya ha dejado huella para muchos pilotos y aficionados. En Albert Park debutó Fernando Alonso en la fórmula 1 hace ya diez años con Minardi. Y en este trazado conquistó el asturiano sus primeros puntos, en el 2003 con Renault. También aquí irrumpió en la F-1 con ferocidad Lewis Hamilton. Al volante de su McLaren le plantó cara a las primeras de cambio a su entonces compañero Alonso.

Button, último vencedor

Ferrari y McLaren son las escuderías que han arrancado más victorias al asfalto de Albert Park. El último ganador fue Jenson Button. El británico se impuso en el 2010 por delante de Robert Kubica (Renault) y de Felipe Massa (Ferrari) en un gran premio marcado por la lluvia. A Button le gusta Melbourne. Ya había resultado vencedor en el 2009 con Brawn GP.

En la última edición brilló Alonso, que patinó en la salida, se tocó con Button y fue superado por gran parte de la parrilla. Remontó 18 posiciones para acabar en la cuarta plaza, con Hamilton pisándole los talones.

Mark Webber, que correrá ante su público, también realizó una actuación memorable en el 2002 con Minardi avanzando trece puestos. Pero ahora juega con Red Bull. Puede aprobar con nota su asignatura pendiente.