El choque ante el Sporting será el partido 100 en Primera del delantero asturiano, que repasa su trayectoria desde su debut, en octubre del 2006 en el campo del Getafe
16 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.No es extraño que la memoria falle al cumplir los cien. Los recuerdos se convierten en una nebulosa poco fiable. «Fue en Getafe, era el minuto quince de la segunda parte y creo que entré por Iaguito». Aquel 29 de octubre del 2006 el que dejó su sitio en el campo para el debut de Adrián fue Filipe Luis y la sustitución se hizo en el minuto 53 de partido. En lo único que no se equivoca el delantero asturiano es en el resultado: «Perdimos 2-0». Los goles de Manu del Moral y Nacho amargaron el estreno del internacional sub-21 en Primera, donde acumula 99 encuentros. Si juega ante el Sporting, alcanzará el centenar. «La verdad es que no conocía la cifra exacta, pero sabía que los iba a cumplir pronto», apunta el jugador.
Adrián hace memoria de aquel día en el Coliseo: «No estaba especialmente nervioso. Tampoco había hablado con nadie sobre la posibilidad de debutar, pero después del partido sí que me llamó gente de mi familia y mis amigos para felicitarme». No fue lo único que le ocurrió después del choque, en el que no logró chutar a puerta, provocó una falta al borde del área, recuperó un balón y perdió tres. «Nada de novatadas, lo que me tocó fue decir unas palabras en la cena, en Madrid. Las dos primeras veces que intenté hablar los otros se pusieron a armar jaleo para que no se me escuchara. Pero después ya me prestaron atención».
-¿Y qué les dijo?
-Nada, que era un orgullo estar allí con ellos y que esperaba que fuera un gran año.
La campaña acabó con el equipo en la zona templada y el ariete acumulando minutos entre el banquillo y la grada. Una situación que provocó su cesión al Alavés, que militaba en Segunda, a mitad de la 2007-2008. De esa etapa en Vitoria, en la que hizo tres goles, guarda uno de sus mejores recuerdos. «Fue muy bonito mantener la categoría. Nos costó mucho salvarnos», apunta.
Primer gol, contra el Barça
En el resto de su centenaria trayectoria, hubo un puñado de momentos especiales. «Por ejemplo, el partido contra el Málaga en La Rosaleda, después de haber estado cedido allí», destaca el asturiano, que en Andalucía pasó «muy buenos ratos». También los ha acumulado en el Dépor; como su estreno goleador en la máxima categoría. «Fue contra el Barça y aquél día sí que estaba asustado. Era la primera vez que jugaba en el Camp Nou y tenía delante a Ronaldinho, a Eto'o y a Messi. Eso impresiona. Me sacó Caparrós y aunque no fue un gran día, porque perdimos, yo guardo un buen recuerdo». Cuando el de Teverga saltó al campo, el ariete camerunés y el mediapunta argentino habían marcado para los culés. Adrián recortó distancias a los ocho minutos de entrar, al aprovechar un despiste de la zaga rival, pero no hubo tiempo para culminar la remontada.
Aquel día, el ariete blanquiazul se midió con el que considera el equipo más potente de los 20 que integran la Liga BBVA. Y pudo comprobar las habilidades del jugador que más le gusta ver sobre el césped: Messi. Sin embargo, el central que más difíciles le ha puesto las cosas en sus enfrentamientos defiende colores blancos: «Pepe tiene unas condiciones tremendas. Es rapidísimo».
Políticamente correcto, no hace distinciones entre los técnicos que han acompañado su trayectoria en Primera. «De Caparrós me quedo con que me hizo debutar; Tapia me sacó a jugar en casi todos los partidos con el Málaga, y Lotina también me da mucha confianza. Los tres tienen un perfil parecido, no sabría cuál es mejor», asegura.
El de ahora lo ha dotado de una versatilidad inesperada, retrasando su posición: «La verdad es que no tengo ninguna queja. Estoy muy a gusto por detrás del punta». Una polivalencia que podrá sumar a las cualidades que ha ido ganando partido a partido: «Ahora me muevo mejor sobre el campo. Sé qué hacer. Soy más maduro». Detalles a aprovechar ante el Sporting, en un choque «fundamental para irnos de vacaciones tranquilos». El de los cien de Adrián.