El Mundial llega apretado al circuito nipón, cuyas curvas teóricamente favorecen a los Red Bull
07 oct 2010 . Actualizado a las 04:12 h.Las curvas de Suzuka siempre han engatusado a los pilotos. Y más en el 2010. El circuito nipón volverá a repartir cartas en un Mundial que no quiere dueños. Mark Webber es el líder. Fernando Alonso ha resucitado gracias a los triunfos en los dos últimos grandes premios y ha cogido el rebufo del australiano en la clasificación, a solo 11 puntos. Y Lewis Hamilton ha sido despojado del primer puesto y del cartel de gran favorito después de dos abandonos consecutivos. Sebastian Vettel y Jenson Button han perdido fuelle. Pero parece improbable que el alemán, el preferido en el equipo Red Bull, renuncie a sus aspiraciones en favor de Webber. Sobre todo después de aparcar su habitual ímpetu para exhibir un pilotaje sólido en Singapur.
En Red Bull se muestran ansiosos por correr en Suzuka y no lo disimulan. «John Hugenholtz ha hecho Suzuka para nosotros», llegó a decir Vettel. El alemán firmó la pole y la victoria en este trazado en el 2009. Pero también Singapur parecía un trazado que daría ventaja al vuelo de los Red Bull y Ferrari se impuso con un extraordinario Alonso en una carrera en la que ni el piloto ni el coche mostraron fisuras. Al F10 le funcionaron los últimos cambios, que incluyeron retoques en el alerón delantero y el difusor, y ahora parece una alternativa seria a sus rivales energéticos, tanto en la calificación como en la carrera.
McLaren necesita cambios
En cuanto a McLaren, fue el perdedor de la anterior carrera, con la retirada de Hamilton y el cuarto puesto de Button, por detrás del resto de candidatos. La escudería británica ha anunciado mejoras. Las necesita para cambiar su tendencia. Button, que se niega a darse por muerto en el campeonato, cree que funcionarán en esta cita.
El trazado nipón prueba la estabilidad y la puesta a punto de los monoplazas en sus curvas, pero también es muy exigente con los motores. Y en esta última característica reside una de las debilidades de Ferrari, puesto que Alonso ya no dispone de motores nuevos y los usados siempre ofrecen más dudas en cuanto a la fiabilidad y, teóricamente, su potencia disminuye.
Mientras los pilotos de Red Bull pueden seguir anulándose en su guerra interna, en Ferrari los galones son para Alonso, pero el equipo espera que Felipe Massa reaparezca por la zona noble para restar puntos a los rivales del asturiano. De hecho, es el único piloto de las escuderías que optan al título que no tiene posibilidades y que puede dedicarse a ejercer de cuña. Así lo recordó recientemente Luca Cordero di Montezemolo, presidente de Ferrari.
Grandes duelos
Suzuka es un trazado desafiante y rico en historia de la fórmula 1. Para los pilotos constituye una especie de hermano de Spa, pero con una mayor demanda de carga aerodinámica. Siempre ha sido un escenario propicio para grandes duelos. Allí se vivieron dos de los más polémicos pulsos entre Alain Prost y Ayrton Senna en 1988 y en 1989. Y en el 2005 Alonso firmó una maniobra espectacular para adelantar a Schumacher por el exterior de la curva 130R. Hay kilómetros suficientes para el espectáculo. Y más cuando quedan cuatro carreras y un buen puñado de aspirantes al Mundial.