Valverde, a un paseo de la Vuelta

Agencias

DEPORTES

El murciano, virtual ganador a falta de la última etapa, y Cadel Evans se sube al podio en detrimento de Basso

20 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Alejandro Valverde ha saltado el último escollo. Es el vencedor virtual de la Vuelta. Solo le falta el paseo triunfal a Madrid, los 110,2 kilómetros de hoy. En la contrarreloj de Toledo la victoria fue para David Millar. El británico le arrebató el triunfo a Samuel Sánchez por 5 segundos. El asturiano firmó una gran crono, devoró 36 segundos de la diferencia de Valverde, pero el jefe de filas del Caisse d'Epargne estaba demasiado lejos en la general. Cadel Evans sí consiguió alterar la clasificación y sube al podio en detrimento de Ivan Basso. El gallego Ezequiel Mosquera mantuvo su quinta posición.

Ayer, el líder sacó partido a su mejora en la lucha contra el reloj. Conocedor de los tiempos que iban marcando sus rivales, le bastaba con ir regulando, dejando hacer al resto. Su pelea no estaba en el triunfo de etapa. Solo tenía que controlar su ventaja. El recorrido de ayer, de 27,7 kilómetros, era duro, peligroso incluso en alguno de sus tramos finales. Pero el murciano no sufrió imprevistos. Se limitó a no arriesgar y a mantenerse cerca. De haber necesitado algo más, pareció tener reservas suficientes para poder sacarlo.

Gesink tomó la salida

Robert Gesink decidió tomar la salida en la contrarreloj. Tenía dudas, y su equipo más, después de ver el estado en el que se encontraba al llegar a La Granja. Se refugió en el autobús del Rabobank entre lágrimas. Estaba destrozado porque el podio ya era imposible. Y todo por culpa de una caída. Pero el corredor, que tiene dos cortes muy feos en una de sus rodillas, ha querido finalizar una carrera de tres semanas, su asignatura pendiente. Es joven y tiene mucho tiempo por delante para ir acomodando su cuerpo a las exigencias de las grandes vueltas.

La contrarreloj de Toledo no ha aportado novedades. El suspense hubiera sido mucho mayor si Evans no hubiera pinchado en plena ascensión a Sierra Nevada.

La Vuelta ha terminado de encumbrar a dos ciclistas con brillante palmarés y clase, Samuel Sánchez y Valverde, que terminaron dándose un abrazo y que tendrán que hablar seriamente para ver cómo se plantea el Campeonato del Mundo, que se disputará la próxima semana en Mendrisio (Suiza). Si ellos no se ponen de acuerdo, adiós selección. En la Vuelta han mantenido un pulso final que engrandece a ambos. Después de 3.183 kilómetros los separan 55 segundos.