El Betis debería cumplir sus dos partidos de clausura contra el Barcelona y el Levante, aunque dispondrá de diez días de plazo para presentar alegaciones e intentar reducir o aplazar la sanción.
El club verdiblanco, que había defendido como postura la reanudación del encuentro en el momento de la suspensión, se considera perjudicado por la decisión de Competición y denuncia la adulteración de la competición, mientras el Athletic, que ya había realizado los tres cambios reglamentarios cuando Armando recibió el botellazo en su ojo derecho y se vería obligado a acabar el encuentro con diez hombres, mostró su satisfacción por la decisión, aunque no por el cierre del Ruiz de Lopera únicamente por dos encuentros.
La plantilla verdiblanca se encargó ayer por la mañana, horas antes de que Competición hiciese pública su resolución, de emitir un comunicado en el que lamentaba la agresión sufrida por Armando, aunque consideraba «incoherente castigar a un colectivo por la actuación de una sola persona».
Los jugadores del Betis, que calificaron el botellazo como «un hecho vandálico e inclasificable», quisieron destacar «la actuación ejemplar de la afición, que debe servir como modelo y debe ser premiada. Carecería de sentido que se castigase al ciudadano que en la calle ayuda a detener a un delincuente que acaba de cometer un delito», fue el ejemplo puesto por la plantilla.
También el presidente del Sevilla, José María del Nido, solicitó que no se castigase al Betis. «El sancionado debe ser el infractor, que es quien cometió el delito», dijo Del Nido.