Ahora pretenden evitar la desaparición de las categorías inferiores del club
30 jul 2004 . Actualizado a las 07:00 h.«Nos vemos obligados a renunciar a competir en Tercera División porque eso es renunciar al mal menor», explicaron los tres liquidadores de la entidad blanquiazul (José Manuel García Cánovas, Miguel Ángel Bouza López y Juan Capellá Pérez), quienes indicaron que si se mantiene con vida el primer equipo «podría producirse un efecto dominó que implicaría el descenso de los demás conjuntos del club». De todos modos, este paso estará condicionado a que la AFE confirme y demuestre que el Compostela tiene una deuda con sus futbolistas de 696.000 euros (unos 115 millones de las antiguas pesetas). Ahora falta saber si los jugadores que denunciaron ante la AFE sus contratos son profesionales o simplemente son amateurs que tienen firmados otros docummentos privados. La decisión de los liquidadores es el principio del fin del Compostela, aunque señalaron que tienen intención de salvar las categorías inferiores. Para eso, decidieron convocar un segundo concurso público. Los liquidadorees reclaman un aval de 12.000 euros para evitar el caos total e impedir que unos ciento cincuenta niños dejen de jugar al fútbol. Esperan noticias de la AFE Los liquidadores, que tomaron posesión del cargo a última hora de la tarde del lunes, no tienen claro todavía si la Federación permitirá la renuncia del primer equipo sin que afecte al resto del organigrama deportivo de la entidad. Miguel Ángel Bouza apuntó, sobre este caso, que «la decisión tenemos que tomarla porque no nos queda más remedio y a partir de ahora empezaremos a estudiar el tema, pues entendemos que si se puede renunciar a todo también se puede renunciar a una parte». Si la Federación desestima la petición del Compos, los liquidadores solicitarán una «decisión cautelar para evitar el daño a las categorías inferiores». La renuncia se debe a que no hubo respuesta al concurso público que solicitaba un aval de 900.000 euros para garantizar la salida del Compos en Tercera División. Quiebra total Según informaron los liquidadores, la deuda que en estos momentos tendría que asumir el club para poder competir en Tercera asciende a 776.000 euros (27.000 se le deben a la Federación, 696.000 los reclama la AFE, 28.000 son los que todavía tiene pendientes de cobro el ex técnico Luis Ángel Duque y otros 24.000 se le deben a Gabi Leis). Con estos números, los liquidadores no vieron otra salida, pues de otro modo se «perjudicaría a los equipos de inferior categoría». Los liquidadores insistieron en que la empresa está en quiebra y que las posibilidades de cobro por parte de los acreedores son mínimas. Juan Capellá señaló que el déficit total podría ascender a 12 millones de euros.