?a Sociedad Deportiva Compostela y el Concello de Santiago tienen el camino expedito para negociar un convenio que contribuya, entre otras inyecciones económicas, a paliar la grave situación financiera del club. La Agencia Tributaria remitió ayer la notificación oficial por la que levanta el embargo que, por importe de unos 3.084.000 euros (más de 510 millones de pesetas) pesaba sobre la S.D. en virtud de la deuda que mantiene ésta con el erario público. La comunicación de Hacienda señala expresamente que queda sin efecto cualquier traba que pudiera existir frente al Ayuntamiento de Santiago debido a que existen las garantías suficientes -las ofrecidas por la S.D. Compostela- en la solicitud del aplazamiento del pago de la deuda. El compromiso del club consiste en la liquidación de sus obligaciones pendientes con Hacienda en un período de tres años con pagos trimestrales. Las garantías ofrecidas no son otras que los ingresos previstos por el club en concepto de derechos de televisión, publicitarios, ingresos de la Liga de Fútbol Profesional por las quinielas y otros. El pronunciamiento oficial de la Agencia Tributaria, que verifica el acuerdo cerrado la semana pasada por el presidente del consejo de administración, José María Caneda, fue recibido ayer con satisfacción entre todas las partes implicadas en las negociaciones para garantizar la viabilidad económica del club. Ahora la S.D. tiene el camino expedito para negociar inyecciones de liquidez en sus arcas para afrontar las deuda pendiente con la plantilla y trabajadores. Dos objetivos prioritarios para ello son la negociación de convenios plurianuales con el Concello y televisión. En el primer caso, aún no se ha hablado de cifras, pero los puntos de partida están distantes. Fuentes próximas al club barajan cifras no inferiores a los 600.000 euros anuales, cantidad que doblaría la disponibilidad municipal, que para la próxima temporada debe atender las demandas no sólo del Compos, sino también del Lobelle en su estreno en la División de Honor de fútbol sala, el Rosalía y, pendiente de despejar la incógnita sobre el retorno a la máxima categoría de baloncesto, el Obradoiro.