La cantante madrileña llega a Vigo en su mejor momento, que ella califica de «inolvidable» tras dos años de gira
01 feb 2013 . Actualizado a las 19:57 h.Solo tiene 30 años, pero ya lleva 15 «cotizados» para su vida laboral. Malú es una cantante que pasó su adolescencia entre escenarios y estudios de grabación, y cuya fisonomía ha ido cambiando de forma espectacular hasta hacerla casi irreconocible ante los ojos de quienes la conocieron cantando Aprendiz con una potencia abrumadora. Malú es la misma, pero es otra. Y es mejor. Además, ahora es mucho más conocida. Su paso por La Voz le ha dado un chute de popularidad que quizás lamente más adelante, pero por ahora lo disfruta y lo rentabiliza llenando teatros y auditorios.
-En Vigo, las entradas para su concierto estaban agotadas casi veinte días antes de su celebración. Tal como está el panorama de la música es un lujo. ¿Es así siempre?
-Está yendo muy bien. La verdad es que estamos teniendo una gira preciosa. Llevo dos años seguidos girando y están siendo inolvidables para mí.
-Ser una de las entrenadoras de «La Voz» y que haya tenido tanto éxito lo debe de estar notando en sus conciertos, ¿no?
-Bueno, lo que ocurre con este programa es que está haciendo que se me conozca un poquito mejor a nivel personal. Como cantante se me puede conocer más o menos, pero siempre he sido muy reservada con mi vida.
-¿Va a continuar en la segunda entrega del programa?
-En principio, sí. Estamos pendientes de algunos detalles, pero pienso que volveré.
-¿Cómo ha sido realmente esa experiencia en «La Voz»? Parecía que la vivían con mucha intensidad...
-Fue una experiencia nueva e interesante, a veces dura porque son personas las que están allí, delante de ti, esperando a que les digas que sí, que se vienen contigo. Son ilusiones y son decisiones muy difíciles de tomar y luego, además, es algo que te llevas a casa. Pero por otro lado ha sido muy positivo, he experimentado muchísimas sensaciones y ha sido bonito. Lo cierto es que no tendría problema en repetir.
-¿Los «coaches» se conocían previamente? ¿Sirvió para reforzar alguna amistad?
-Nos conocíamos todos de antes y el vínculo ya estaba creado. Nos llevábamos superbien y es algo que se mantiene.
-Cuando empezó a cantar no había este tipo de programas. Si iniciara su carrera ahora, ¿se animaría a intentarlo así?
-No lo sé, todo es planteárselo. Si mi momento de empezar fuera ahora y tuviera una oportunidad así, y encima sin ser un reality, sino un programa en el que nadie va a juzgar absolutamente nada más que tu voz, sí que me hubiera presentado, porque me parece un programa muy limpio.
-De todas formas hace mucho que Malú dejó de ser aprendiz, ¿no?
-Creo que toda la vida eres aprendiz y lo bonito es precisamente seguir aprendiendo. Si no, menudo tostón.
-En su último disco, «Dual», en el que recopila canciones que ha compartido con otros artistas, ¿se ha regrabado algún tema?
-No, la idea era precisamente mantener la esencia de cada una de aquellas canciones en el momento en el que se grabaron, por eso nunca hubo la intención de volver a repetir ninguna. De hecho, al lado de cada tema viene la fecha en la que se hizo. Pienso que se puede ver toda la evolución a nivel musical y vocal a lo largo de toda mi carrera. No hay ninguna reinterpretación. Obviamente, los temas nuevos, los inéditos, se grabaron expresamente para el álbum.
-¿Cómo se plantea esta última gira?
-La idea es que sea muy dinámica. Sobre todo, que sea algo divertido, que la gente salga con una sonrisa. Lo que hemos hecho básicamente es una recopilación de las canciones de toda mi carrera, de esas canciones que sientes que han llegado más a la gente. No solo recuperamos un disco, sino que hay un poquito de cada uno de ellos. La gente se sorprende mucho.
-Es declarada amante de los animales, ¿pero es cierto que además colabora como auxiliar en una clínica veterinaria?
-Sí, me gustan mucho. Tengo tres perras y un gato. Y, sí, colaboro. Hay una asociación que se llama Mascoteros Solidarios en la que se dedican a curar y operar a animales de albergues sin ninguna ayuda económica. Como necesitan gente, cuando tengo tiempo me gusta ir a echar una mano.
-¿Qué es lo que menos te gusta de su profesión?
-Con el tiempo he ido aprendiendo a darme cuenta realmente de dónde estoy y también a no valorar más allá. Lo que más me gusta del mundo es subirme a un escenario, interpretar, sentir las canciones, crear, hacer cosas diferentes, moverme... A veces hay otras cosas que no te llaman tanto la atención, pero tampoco te disgustan. Y con el tiempo también te das cuenta de que todo forma parte de lo mismo, ¿no?
VIGO | Sábado, 2 de febrero | 21.30 horas | Auditorio Mar de Vigo (avenida de Beiramar, 59) | Entradas agotadas