El premio de poesía Reina Sofía distingue a Ernesto Cardenal

miguel lorenci MADRID / COLPISA

CULTURA

El fallo rompe la ley no escrita que alterna cada año el galardón entre las dos orillas del Atlántico

04 may 2012 . Actualizado a las 06:58 h.

«No sería justo que, por razones extraliterarias, alguien tan significativo para la poesía hispana del siglo XX como Ernesto Cardenal quedara excluido de este premio». Así razonaba el también poeta Luis Antonio de Villena, miembro del jurado del premio Reina Sofía de poesía, el fallo de este notorio galardón en favor del poeta y político nicaragüense. El fallo de la vigésima primera edición rompía la ley no escrita que alterna cada año el galardón entre las dos orillas del Atlántico. En la edición pasada el premio fue para la cubana Fina García Marrúz.

Tocaba español este año y a punto estuvieron de llevárselo el salmantino Antonio Colinas y la malagueña María Victoria Atencia. Al final, con discusión y por mayoría, que no por unanimidad, el galardón se fue a Centroamérica, para distinguir y poner en valor la ingente, poliédrica y comprometida obra de esta sacerdote elevado al rango cardenalicio por su apellido y en la que conviven con naturalidad la religión y la revolución.

Un Ernesto Cardenal que ha sido finalista recurrente tanto del premio Cervantes como de este galardón dotado con 42.100 euros, considerado como el Nobel de la poesía hispana y al que optan este año medio centenar de candidatos. Cardenal lo recibía de madrugada en Managua «con sorpresa y agradecimiento». Se define aún como «poeta revolucionario», sigue «al lado del pueblo y frente a los opresores», pero ha trasvasado su interés «de la poesía a la ciencia». «La ciencia es un camino para llegar a Dios, como la poesía, y más directamente que a través de las religiones» apunta.

El comprometido poeta y sacerdote católico, activo teólogo de la Liberación, político y ministro de Cultura con los gobiernos sandinistas tras la caída de la dictadura de Somoza, superaba así el lastre de su perfil político para hacer valer su gran talento poético.